Tras el retiro del monumento ecuestre al General Manuel Baquedano realizado en entre el jueves y viernes pasado, este domingo las autoridades comenzaron la obra de afeamiento y de indignidad más grande para lo que queda de la destruida plaza y Tumba del Soldado Desconocido, con la instalación de un enrejado perimetral que será -sin duda- el nuevo objeto de deseo para los manifestantes.
«La Intendencia Metropolitana mandatada por los acuerdos tomados por el Consejo de Monumentos dispuso y está ejecutando durante el día de hoy domingo la instalación de faenas y cierre perimetral temporal en torno a la base del Monumento a Baquedano para permitir el cumplimiento de los acuerdos y realizar próximamente las obras de diagnóstico, protección y refuerzo al plinto y a la tumba del soldado desconocido», señalo el cuestionado Consejo de Monumentos Nacionales a través de un comunicado.