El senador DC, Francisco Huenchumilla, valoró la aprobación de escaños reservados para pueblos originarios, afirmando que con esta iniciativa se ha hecho un cambio histórico y cultural muy profundo en la sociedad chilena.
“La lección que sacamos de lo que hoy estamos viviendo, es que sin lucha no hay cambios. Si no hubiera habido estallido social, probablemente no estaríamos hoy día tratando este proyecto; ni sin la larga lucha de los pueblos originarios, y en particular, del pueblo mapuche, que a lo largo del siglo XX desarrolló (…) una profunda, y a veces dramática interpelación al estado de Chile y a sus clases dirigentes”, destacó.
La sala del Senado aprobó el proyecto de Reforma Constitucional que asegura escaños reservados para pueblos originarios en el proceso constituyente, por lo que sólo resta su promulgación por parte del Ejecutivo.
Sobre el tema, Huenchumilla aseguró que en la sociedad chilena se está produciendo “un cambio cultural profundo”, y destacó que “sin lucha no hay cambios”, haciendo una alusión al estallido social y a “la larga lucha de los pueblos originarios”.
“Por primera vez en la historia de Chile se reconoce a los pueblos indígenas como sujetos colectivos (…) está la Ley Indígena y otras leyes siempre los trataron como individuos. la virtud de esta Reforma Constitucional es que reconoce a los pueblos indígenas como sujetos de derecho. Así se están incorporando al espacio público nacional”, valoró el parlamentario.
“Éste es un cambio histórico, un cambio cultural profundo en nuestra sociedad, que tiene una larga noche de discriminación y de maltrato de los pueblos originarios, y en particular, del pueblo mapuche, a quien también no sólo se lo discriminó, y se creó una cultura del racismo y de la exclusión, sino que se le arrebató su territorio, lo que hoy día nos sigue penando dramáticamente, y nos sigue interpelando”, consideró el legislador falangista.
Lección
“La lección que sacamos de lo que estamos hoy día viviendo, es que sin lucha no hay cambios. Si no hubiera habido estallido social, probablemente no estaríamos hoy día tratando este proyecto; o sin la larga lucha de los pueblos originarios, y en particular, del pueblo mapuche, que a lo largo del siglo XX desarrolló a través de sus dirigentes y organizaciones una profunda y a veces dramática interpelación al estado de Chile y a sus clases dirigentes”, planteó.
“Sin los jóvenes que lucharon y que dieron su vida por esta causa, probablemente no estaríamos acá. Por eso, más allá de los detalles, esto es un hito central, de reconocimiento de los pueblos, pero al mismo tiempo es un avance cultural significativo para nuestro país”, destacó.
“Hoy día entramos a una nueva etapa, donde este país está conformado por grupos y pueblos de distintos orígenes, pero que juntos, queremos construir un país distinto dentro de la institucionalidad (…) esa es la invitación que se le hace a los pueblos originarios: a participar del estado, de sus decisiones colectivas, y de todo lo que tiene que ver con nuestra dignidad y con nuestro desarrollo”, recalcó.
Agradecimientos
El parlamentario reconoció además el trabajo de la Comisión Mixta, porque “dentro de la dura discusión, estuvo la generosidad y el profesionalismo intelectual como para entender las distintas posturas y todos cedimos. (…) la Constitución del 80, con sus altos quórums, nos obliga a ceder. Si no, no hay acuerdo posible”.
“Quiero agradecer las generosas palabras hacia mi persona, del presidente de la Comisión de Constitución del Senado, el senador y mi amigo Alfonso De Urresti. Creo que refleja sus condiciones políticas, y personales, con que dirigió este difícil proceso”, apuntó.
“También a los senadores y diputados del oficialismo y de la oposición por su trabajo. Y también quiero ser justo, creo que los ministros del gobierno, la señora Karla Rubilar, y don Cristián Monckeberg y el subsecretario (…) yo creo que cumplieron adecuadamente la responsabilidad histórica que en ese minuto tenía”, aseveró.
“Y por supuesto, mi reconocimiento a los dirigentes de todos los pueblos indígenas de Chile, y a los dirigentes indígenas y mapuches específicamente, a sus alcaldes, académicos, y a todos los que han alzado las banderas en la lucha por nuestra dignidad. De tal manera que hoy día, veámoslo así, es un día histórico, celebremos, porque comienza una nueva etapa en esta relación con el estado chileno”, concluyó.