Un grupo de manifestantes volvieron a tomarse la Plaza Italia (Dignidad), como es habitual los días últimos días viernes, pintando de color rojo la estatua del General Baquedano que se ha transformado en una escultura icónica tras el estallido social del 18 de octubre del año pasado.
De esta forma, más de un centenar de personas se congregaron en la denominada “zona cero” y un grupo de ellos comenzó a pintar completamente la escultura de Baquedano, cuya idea es la de expresar la sangre derramada por las violaciones a los derechos humanos tras el estallido social.
La intervención fue hecha por “los caídos y las caídas durante la revuelta” y también hubo banderazos con los símbolos mapuche y pancartas por el apruebo y pidiendo por una asamblea constituyente.
Ante esta situación, personal de Carabineros llegó hasta el lugar para comenzar a dispersar a los manifestantes, debido a la “vandalización del monumento”, por lo que se hizo uso de carros lanza agua y bombas lacrimógenas.