Greenpeace junto al destacado artista visual Claudio Caiozzi (Caiozzama) realizaron una intervención en el frontis del Museo de Arte Moderno (MAC) en donde se desplegó una enorme obra de 15 por 15 metros titulada “Soltemos el Agua”, la cual busca alertar respecto de la situación de crisis hídrica que enfrenta el país y la necesidad de incorporar el tema del agua en caso de aprobarse la redacción de una nueva Constitución.
“A las puertas del Plebiscito de este domingo, y en conjunto con uno de los artistas más destacados del país y que ha tenido distintas intervenciones visuales en el contexto del estallido social, quisimos exponer la necesidad de que la crisis del agua que enfrenta el país sea asumida como una cuestión prioritaria en caso de que se confirme la opción de redacción de una nueva Constitución”, dijo Estefanía González, coordinadora de campañas de Greenpeace.
Agregó que “el agua, lejos de ser un tema de división política, debe ser un punto de unión para los chilenos en el sentido de que no puede seguir siendo un recurso privado, sino un elemento indispensable cuya prioridad debe ser su acceso a toda la población y entender que su disponibilidad constituye un derecho humano básico y un elemento clave para los ecosistemas”.
Por su parte, Caiozzama -cuyas obras en el centro de Santiago se han multiplicado durante el estallido social- explicó el sentido de una obra digital que fue trabajada en distintas capas, indicando que “quise exponer el problema que tenemos hoy con la falta de agua en distintas partes de Chile. Y esta obra lo que hace es mostrar la idea del agua liberándose de los captores que la han tenido retenida por largo tiempo. Y todo bajo la atenta mirada de ángeles y una divinidad hindú que pide liberarla. Creo que hay algo de espiritualidad en el agua”.
Respecto de la situación que enfrenta el país en relación con la falta de agua, Caiozzama señaló que es indispensable un cambio de trato y mirada.
“Y me refiero al gobierno, porque la gente sabe perfectamente la importancia que tiene el agua y que se trata de un derecho humano básico. El problema es que la autoridad cree que el agua es como el cobre o el oro y que solo tiene una evaluación económica. Quise sumarme a esta campaña para que se acabe la injusticia que hoy existe con el agua en Chile. No puede ser que sigan siendo unos pocos los que nos regalan las sobras de algo tan importante como el agua”, añadió.
La campaña “Suelta el Agua” de Greenpeace ha sido firmada por casi 100.000 personas y ha denunciado el accionar de distintos actores, como la transnacional Anglo American, como responsables de la falta de agua en la zona central del país.