Este miércoles, cables de agencias internacional revelan que el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinian, ha descartado «por ahora» una solución diplomática al conflicto abierto con Azerbaiyán en la región de Nagorno Karabaj y, pese a las ya dos Treguas Humanitarias, ha planteado el reclutamiento de voluntarios para reforzar el despliegue militar en el territorio ocupado y legalmente de Azerbaiyán, como señala la ONU. Declaraciones que se dan a un día de la reunión que sostendrán los cancilleres de ambos países en Washington para logar una tregua.
Alentando la guerra
Pashinian en declaraciones que reproduce la agencia oficial Armenpress, deja en claro que han descartado la solcuión pacífica: “Debemos entender claramente que el tema de NK, al menos en esta etapa y por un período muy largo de tiempo a partir de esta etapa, no tiene una solución diplomática».
El premier armenio pide además que «formen destacamentos de voluntarios que cumplirán con la protección de los derechos de la nación armenia». Estas unidades, ha explicado, quedarían bajo mando del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas y podrán ser por tanto desplegadas en labores de combate, según un mensaje recogido por Armenpress.
«Todos debemos responder, vosotros sois quienes debéis tomar hoy las armas y ser nuestros héroes para lograr la victoria que merecemos», ha afirmado, subrayando que esta victoria «requiere del esfuerzo de todos».
“Independientemente de lo que suceda, debemos luchar por los derechos de nuestra gente. Hoy, luchar por los derechos de nuestro pueblo significa ante todo tomar un arma y dedicarse a la protección del derecho a la patria. Podremos lograr una solución diplomática aceptable para nosotros solo en el caso de organizar y continuar este proceso de manera efectiva. Azerbaiyán dice que no está de acuerdo con nada más que la capitulación de Karabaj. Por lo tanto, proteger los derechos del pueblo de Artsaj significa proteger los derechos del pueblo armenio. No hay Armenia sin Artsakh ”, agregó el primer ministro.
Pashinian ha dado por hecho que, «al menos en este momento y durante un largo periodo de tiempo», «no hay una solución diplomática» al conflicto en Nagorno Karabaj, una región de mayoría armenia que reivindica su independencia de Azerbaiyán.
Rusia aliado de Armenia
Las dos partes, por mediación de Rusia, pactaron el 10 de octubre un alto el fuego que no se tradujo en una interrupción de los combates, habida cuenta de que las dos partes se han acusado de violar los compromisos firmados. Los ministros de Exteriores de Armenia y Azerbaiyán han vuelto a citarse este miércoles con su homólogo ruso, Sergei Lavrov, para tratar de avanzar.
El Ministerio de Exteriores de Rusia ha confirmado que Lavrov ha abordado con los dos ministros «cuestiones urgentes relacionadas con el cumplimiento de los previamente alcanzados compromisos del alto al fuego en la zona del conflicto», así como «la creación de condiciones para una resolución duradera» de la crisis, según la agencia Sputnik.
Pashinian ha agradecido la implicación de Rusia, «un aliado estratégico de Armenia», como contraposición a las posturas adoptadas por los tradicionales respaldos de Azerbaiyán, en particular Turquía. El Gobierno armenio ha anunciado este miércoles que prohibirá las importaciones turcas a partir del 31 de diciembre como represalia.