Con ventas caídas en 70% a nivel nacional, sobre las 3.000 patentes afectadas y 18.000 personas han visto afectados sus ingresos, fueron algunas de las devastadoras conclusiones que realizó la Asociación Gremial de Dueños de Botillerías de Chile (Agbotch) de su industria, luego de más 5 meses de iniciada la pandemia en el país.
Desde el gremio comentaron que la crisis sanitaria ha sido muy perjudicial para su sector, principalmente por las restricciones de horario (que comenzaron con el toque de queda y terminaron siendo más restrictivas en algunas comunas con la cuarentena), fiscalizaciones arbitrarias y prohibición de funcionamiento por parte de los municipios, lo que los llevó incluso a presentar un recurso de protección contra la determinación de algunos alcaldes.
“Como botilleros nos hemos sentido profundamente desplazados por las autoridades, hemos intentado incesantemente generar reuniones con ministros y subsecretarios de distintas carteras, además de alcaldes, para presentarles diferentes alternativas para poder funcionar, tal como lo hacen los otros sectores, pero constantemente nos encontramos con que la potestad no es de ellos, y así se pelotean la responsabilidad”, afirmó Marcial Pérez, presidente de Agbotch.
“Nosotros nos sentimos parte importante del barrio y una fuente de abastecimiento diariamente a millones de personas, pero no solo de bebidas con alcohol, sino que de productos como abarrotes, agua o artículos de aseo. Además, somos locales que estamos dentro de la comunidad, a pasos de muchos chilenos que no tendrán que desplazarse grandes distancias para poder comprar insumos de primera necesidad, y creemos que estos importantes argumentos no han sido considerados por las municipalidades”, detalló Pérez.
Otro punto que preocupa fuertemente al gremio sobre el escenario actual es que dado el cierre de botillerías ha comenzado un incipiente mercado negro. “En algunas comunas ya hemos percatado la presencia de clandestinos, lo cual es un gran perjuicio para toda la industria. No se puede permitir que esto siga aumentando”, sentencia, el presidente de Agbotch.
Interrogantes para Fiestas Patrias
Septiembre y las Fiestas Patrias son un hito fundamental para las botillerías del país en cuanto a las ventas, debido a que ese mes representa cerca del 10% de las ventas anuales.
Es por esto, que desde Agbotch miran con bastante incertidumbre – pero también optimismo – lo que será esta festividad, considerando que diversas comunas ya se encuentran en etapa de transición.
“Esperamos que para agosto y septiembre podamos comenzar a trabajar con cierta normalidad e intentaremos solicitar una extensión en los horarios de funcionamiento, pero siempre cumpliendo con las exigencias que la autoridad sanitaria nos solicite. Creemos que con el cierre de las fondas esto podría generar un mayor consumo en los domicilios de distintos productos, lo que provocaría un aumento en las ventas de los negocios de barrio”, concluyó el presidente de Agbotch.
