Durante estos meses de cuarentena nos encontramos con decenas de situaciones fotografiables en nuestros hogares que jamás habíamos observado: iluminación, detalles, puntos de vista que se repiten día a día y que nos ayudan a entrenar nuestra mirada, incluyendo interpretaciones a partir de nuestra propia creatividad. ¡Sí! es que cuando salimos de la rutina y de la zona de confort, tenemos posibilidades de reconvertirnos y aprender cosas nuevas con el simple hecho de tener una mirada positiva de la vida, es lo que comenta Jonas Papier, director y fundador de Motivarte.
Así es como el otro día me encontré solo en la cocina de mi casa, en un horario que hacía muchos años no estaba allí o simplemente estaba, pero no prestaba atención, y de pronto vi entrar una luz que me dejó impactado por su belleza. Un simple rayo recto que pasaba a través del humo del café que me esperaba en la mesa.
Enseguida agarré mi teléfono, un motorola one macro, que en realidad es mi “cámara fotográfica de mano” y comencé a explorar a través de fotografías diferentes.
Es cierto que cada vivienda tiene diferentes vistas a través de sus ventanas o balcones. Están quienes sólo pueden mirar hacia arriba y ver un pedacito de cielo, hasta quienes tienen grandes patios con vista a inmensos paisajes urbanos o rurales. También están quienes disfrutan vistas al mar o a la cordillera.
Ésta es una receta fotográfica simple para obtener las mejores capturas de los paisajes que vemos desde nuestras ventanas:
Utilizar la cámara de nuestro teléfono en modo manual y subexponer la imagen lo que sea necesario, hasta ver los edificios negros y el cielo lo más saturado posible, aunque parezca oscuro a primera vista.
En este caso, si contamos con un equipo con tecnología Quad Pixel como el motorola one fusion o motorola one hyper, esto cuadruplica la sensibilidad a la luz para fotos sorprendentemente nítidas y con menos ruido. En caso de tener dudas podremos hacer un “bracketing”, que significa hacer varias fotos de diferentes mediciones para luego elegir la mejor.
Una vez que elegimos la imagen que mejor representa los colores del cielo, los vamos a resaltar a través de un editor de fotografía como el Google Photos, con el que usaremos algunas de las herramientas más básicas, pero que nos darán un resultado imponente. Éstas son: calidez, saturación, sombras, brillo, contraste y, en algunos casos, el HDR que nos suma más detalles a los paisajes.
Luego, les recomiendo que suban sus fotos a las redes sociales para analizar el efecto que generan entre familiares y amigos.
En el caso de las fotografías de paisaje urbano que les dejo acá de ejemplo, debemos destacar que son imágenes hechas durante la mañana, minutos antes del amanecer; por lo tanto, el colorido de los cielos está directamente ligado al amanecer en sí, a las nubes, pero también a cómo fue expuesta esa imagen y a la edición posterior.