El alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín (UDI), salió a defender su re-descubierta visión política luego de declararse el pasado domingo como «socialdemócrata», lo cual le ha valido duras críticas trasversales en el mundo político.
Frente a este escenario, el dos veces candidato presidencial replicó que «en Chile a la gente le encanta poner etiquetas, y no me preocupa (…) Yo digo lo que pienso».
Profundizó diciendo que «sí me preocupa que la gente entienda el concepto de fondo, que Chile en el futuro, con todos los problemas que tenemos, ya no da en el eje derecha-izquierda; Chile necesita un gobierno que yo lo llamo de convivencia nacional».
Y si bien reconoció saber que hacer públicas estas opciones «en mi sector acarrea puros palos», insistió que «es lo que creo que necesita Chile; no necesita un gobierno de derecha ni de izquierda en el sentido clásico de la palabra«.
Lavín recalcó que su propuesta, aunque le cueste “palos” desde su sector, postula tomar elementos de la socialdemocracia europea e incorporarlos en un futuro gobierno.
“Significa acoger ideas que no son propias de la centroderecha, como un rol más fuerte del Estado, garantizar derechos sociales, que son cosas que vienen de las socialdemocracias europeas”, expresó.
Aunque ahora parece ser visto como la principal carta presidencial de la derecha para la elección presidencial de noviembre de 2021, Lavín aclaró que por ahora es «candidato a alcalde de Las Condes y espero que me vaya bien en la elección (municipal) que es en abril».
Cabe recordar que su correligionaria y alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, lo tachó de «populista» y fustigó que «uno no puede decir cualquier cosa con tal de ganar un par de puntos»; mientras que en la oposición la DC lo catalogó de «oportunista» y Revolución Democrática aseguró que Lavín «acomoda sus ideas en función de qué está marcando más en las encuestas».
