El poderoso equipo alemán Bayern Múnich ridiculizó a un Barcelona al que le propinó una paliza contundente con un 8-2 por la Champions League 2019-2020, volviendo a hacer presentes los fantasmas europeos del conjunto azulgrana de las últimas temporadas.
En la primera parte del partido, el equipo bávaro fue una aplanadora para el Barcelona y en el minuto 31 ya vencía por un contundente 1-4 (Müller por partida doble, Perisic y Gnabry) a causa de su implacable efectividad ante la portería rival y una defensa azulgrana endeble y que hacía agua ante los gritos del técnico blaugrana Quique Setién en la salida del balón.
A pesar de que el cuadro español tuvo varias ocasiones de gol para evitar que el resultado fuera tan abultado en la media parte, los jugadores sucumbieron ante una eficaz delantera alemana que no perdonó a la hora de hacer ingresar el balón a la portería que defendía Marc-André Ter Stegen.
Ni el uruguayo Suárez en un mano a mano ante el portero ni Messi después de una gran jugada individual consiguieron perforar la meta de Neuer, quien sí fue batido por su propio compañero Alaba al despejar de forma defectuosa un centro de Alba.
En el minuto 56 la esperanza renacía para el cuadro culé, cuando un recorte de Suárez ante Boateng lo dejó solo dentro del área para fusilar a Neuer y recortar distancias, pero la algarabía duró poco.
En el 63, Alphonso Davies se inventó una jugada extraordinaria por la banda izquierda que dejó retratado a Semedo y cedió la pelota a Kimmich para que tan solo la tuviese que empujar para hacer el quinto.
La debacle llegó en el 82, cuando Lewandovski puso el sexto con un remate de cabeza y Coutinho, cedido por el Barcelona al Bayern, culminó la goleada con el séptimo y el octavo en el 86 y el 89, respectivamente.