La Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados aprobó las indicaciones pendientes y despachó a la Sala, el proyecto de ley que tipifica como delitos la incitación a la violencia y al odio como también sanciona el negacionismo, es decir, a quienes nieguen casos de violaciones a los DDHH establecidas en informes oficiales como las comisiones Rettig y Valech.
El diputado PPD, Tucapel Jiménez, dijo que el país “requiere de esta ley con más urgencia que nunca, ya que con tristeza hemos visto cómo hay sectores que con más fuerza no respetan la democracia, ni a nuestros pueblos originarios, por ejemplo, al realizar cánticos racistas”.
El parlamentario afirmó que “también buscamos proteger el dolor de los familiares de las víctimas de violaciones a los DD.HH, eso es lo que han hecho las sociedades modernas y nosotros debemos seguir por esa senda«.
“En democracia, la tolerancia y respeto por el pensamiento del otro, es fundamental. Sólo así podemos tener un país que camine hacia la dignidad, justicia y respeto por los derechos humanos de todas las personas”, indicó.
En el caso del negacionismo, la iniciativa contempla un máximo de 3 años de cárcel y multa máxima de 3 millones de pesos. La incitación a la violencia física y al odio quedaron con sanciones menos drásticas. Si se trata de un funcionario público quien realice estas acciones, sufrirá además la pena de inhabilitación en el ejercicio de sus funciones.