Una de las grandes cosas que nos ha dejado la cuarentena es la activación física. Hay diversas aplicaciones, clases virtuales y vídeos que facilitan realizar rutinas sin salir de casa, sin embargo, hay que informarse sobre la actividad física para no adquirir malos hábitos.
Muchas comunas de nuestro país están entrando en etapa de transición y si bien no es un llamado a salir de forma recurrente, sí tenemos una mayor libertad para hacer deporte al aire libre los días de semana. Ante esto, muchas personas quieren retomar la actividad física o bien aprovechar estos momentos para comenzar a entrenar por primera vez.
Elizabeth Luna, nutricionista de Sodexo, explica que “realizar actividad física no solo nos ayuda a prevenir enfermedades y mantenernos sanos, sino que también juega un importante rol en nuestro estado de ánimo, lo que es importantísimo especialmente en medio de la pandemia, donde hay mayor ansiedad en la población”.
Pero, como en todo, es necesario hacerlo de manera responsable, y eso incluye alimentarse de manera correcta para no afectar la salud. Existen algunos mitos sobre la alimentación y el ejercicio que vale la pena conocer. Para eso Elizabeth Luna, desmiente las siguientes creencias:
Mito 1: Ejercitarse en ayunas y por la mañana es la mejor opción
Es verdad que el ejercicio te hace sentir más activo debido a la liberación de endorfinas, adrenalina y otras hormonas que influyen en el estado de ánimo, aliviando estados depresivos y controlando la ansiedad. También es cierto, que ejercitarse por la mañana es una buena opción para que el día pueda fluir mejor y sentir más ánimo. Por otro lado, está el hecho de ejercitarse en ayunas, cada persona es un universo distinto, por lo tanto, se debe entender como tal, con diferentes realidades y hábitos, sin embargo, entrenar en ayunas puede generar sensación de fatiga y por consecuencia disminución del rendimiento, a raíz de la utilización de los depósitos de glucógeno de los músculos y del hígado (fundamentales para la contracción muscular durante el ejercicio); además esta acción no asegura una baja importante de peso, tampoco un notorio cambio en el porcentaje de grasa corporal. Lo que definitivamente no es un mito, es que siempre se debe tener una guía nutricional y de ejercicios personalizada y recomendada por un profesional de la salud.
Mito 2: Solo comiendo proteínas voy a aumentar la masa muscular
Las proteínas son macronutrientes esenciales que adquirimos a través de los alimentos y que cumplen funciones importantes para el buen funcionamiento del organismo. Algunas de sus funciones son formar tejidos, transportar vitaminas y defender el organismo de invasores que puedan provocar alguna enfermedad. Si bien, cumplen un rol fundamental en el crecimiento muscular consumirlos por sí solos y no distribuirlos durante el día, es decir, consumirlos en un solo tiempo de comida no generará mayor masa, complementarlo además con una ingesta de calorías controladas por sobre lo que se necesita, para cumplir con las necesidades diarias, el hecho de ganar masa muscular no es un proceso fácil, por lo que la ingesta controlada y paulatina de calorías sería un buen comienzo, otro hábito es la distribución de la alimentación, sin eliminar ningún tipo de alimento, como los hidratos de carbono (cereales, legumbres, hortalizas y frutas), potasio (frutas, verduras, lácteos, cereales integrales, frutos secos y semillas), zinc, vitamina C y E. La hidratación es fundamental, ya que se relaciona con el rendimiento deportivo, por ende, al no progresar no habrá rendimiento ni ganancias. Por último y muy importante es el descanso, de esa manera recuperas y puedes seguir ejercitando para obtener los resultados esperados. Es importante mencionar que una adecuada y controlada ingesta de proteínas evitará generar efectos que pueden ser perjudiciales para la salud, como elevar los niveles de ácido úrico en sangre(hiperuricemia) o daño renal, en el caso de las personas con diabetes e incluso optar por una dieta proteica, como consecuencia puede alejarnos de una dieta equilibrada y saludable.
Mito 3: Debes re hidratarte con las bebidas isotónicas
Su objetivo es reponer líquidos y electrolitos tras una dura sesión de ejercicio, sin embargo, estas contienen un elevado aporte de azúcares y carbohidratos, por lo que no se recomienda consumir bebidas isotónicas cada vez que entrenemos, sino que puede ser consumida de vez en cuando y cuando hayamos realizado un gran gasto energético. Es importante señalar que el agua es la principal aliada para evitar la deshidratación y el aumento de la temperatura corporal, que como consecuencia sería un limitante para el rendimiento.
Mito 4: Los suplementos son imprescindibles
Muchas personas creen que la única forma de tonificarse es consumiendo suplementos alimenticios, sin embargo, tal como dice su nombre son suplementos en el caso de tener alguna carencia. Por lo tanto, si tenemos una alimentación equilibrada con la incorporación de los nutrientes fundamentales para nuestro desarrollo no necesitaremos consumir estos productos de forma recurrente. Lo anterior no significa que los suplementos sean malos, sino que tienen una finalidad de complementar nuestra alimentación en caso de necesitarlo, no como un elemento imprescindible.
Mito 5: Las vitaminas y minerales dan energía
Otros de los mitos que existen en torno a la alimentación y el deporte es que las vitaminas y minerales aportan energía. Estos, se denominan micronutrientes porque los necesitamos en pequeñas cantidades,
sin embargo, son indispensables para el funcionamiento de nuestro cuerpo, ya que ayudan a reparar tejidos, al crecimiento y al sistema inmunológico, pero no aportan energía. Es importante señalar que estos micronutrientes se pueden incorporar de forma segura y natural al organismo, a través de una alimentación variada y equilibrada, rica en frutas y verduras principalmente, pero esto, no ocurre con los suplementos vitamínicos, ya que es muy fácil tomar demasiado y generar efectos dañinos para la salud.