lunes, diciembre 23, 2024

«No es el momento de agendas personales ni partidistas»: Senador Pugh dice que proyecto de retiro del 10% no es una buena política pública

El parlamentario por Valparaíso apuntó a sus colegas de Chile Vamos que apoyan la iniciativa en el Senado, indicando que "no tenemos que irnos entonces al discurso fácil, al populismo, sino siempre al problema de fondo. Ellos tendrán sus motivos y tendrán que explicarlos".

Debe leer

El senador por Valparaíso, Kenneth Pugh, criticó el actual proyecto de retiro del 10% de las AFP que se llegó al Senado luego de sortear exitosamente la Cámara de Diputados, indicando que «en lo personal, creo que no es una buena política pública y, es más, no tenemos que tener ahora ni agendas personales ni agendas partidistas«.

De paso, le recordó a los senadores de Chile Vamos que apoyan la propuesta que no hay que irse por los discursos facilistas y el populismo.

El parlamentario precisó que lo que debe primar en la actual situación «es ayudar a las personas, para lo que se debe buscar una política pública 2.0, que tenga un mayor alcance«, precisando que en ese contexto «el retiro del 10% de las AFP es solo para una parte del país, 5 millones y medio de personas que están en las AFP, de las cuales menos de la mitad, dos millones y medio ni siquiera pueden sacar una cantidad que les va ayudar«.

Al respecto, abogó, en conversación con el programa Buenos Días a Todos de TVN, que «es mucho mejor usar recursos del Estado, recursos solidarios, nuestros impuestos, y ponerlos a disposición de ellos para que no afecten sus fondos. Por eso la Constitución protege los recursos que están considerados para temas de previsión, y es por eso que hoy esta política no es una buena política pública. Entonces este es un tema más de principio que de fondo, entendiendo que el Estado tiene que llegar con recursos a las personas ahora, de forma directa, transferencia directa, y amplia».

Añadió en este punto que «yo me hago cargo de mis declaraciones (…) Este es el momento de las agendas nacionales, de tener soluciones. Ya tenemos un primer acuerdo: US$12 mil millones que están disponibles para poder reactivar, llegar a las personas. Entonces la pregunta es cómo vamos a distribuir esos 12 mil millones primero, antes de sacar los recursos de las AFP«.

En ese contexto se refirió también, indirectamente, a sus colegas de Chile Vamos que han anunciado su apoyo a la propuesta, señalando que «no tenemos que irnos entonces al discurso fácil, al populismo, sino siempre al problema de fondo. Ellos tendrán sus motivos y tendrán que explicarlos. Y yo creo que lo que tenemos que hacer es resolver por un tema de pago, que no es un tema del Gobierno de turno; es más, las personas que trabajan en el Estado, la gran mayoría de ellas pertenecen a partidos políticos; por lo tanto todos tienen que ponerse de acuerdo para que estos recursos lleguen a las personas».

Además, subrayó que «Chile tiene recursos; ahorró durante muchísimo tiempo, ha tenido una política fiscal muy responsable, por lo tanto recursos para alimentarse hay suficientes y hay que llegar con ellos. Lo segundo es entender que tenemos que llegar a personas a las que los recursos de las AFP no van a llegar. (…) No es tan fácil como decir «saque su 10% y arregle usted su problema», porque, o no tiene la cantidad suficiente o definitivamente no está en la AFP porque hay muchísima gente que no está cotizando. Entonces esa es la primera realidad; si realmente nos preocupan las personas, tenemos que llegar con política pública para todos ellos, y quien es más eficiente no es el mercado, es el Estado. Este es el momento en el que el Estado está en su mejor expresión; para que el Estado funcione tiene que haber unidad, unidad política, y eso es lo que tiene que primar, el patriotismo».

Respeto a las reglas

El senador, por otra parte, fue claro en indicar, ante la disyuntiva de sacar adelante este polémico proyecto, que «para eso hay que cumplir las reglas. Las reglas claras. Si se saltan la constitución, tal como lo han hecho ahora, buscando un resquicio, ya con una minoría no se logran los 2/3, se está yendo con contra de los principios«.

Agrego que «esta es una facultad exclusiva del Presidente, se le está imputando, no a la persona, al nombre, sino que al Presidente, la facultad que él tiene para hacer esto y eso no corresponde. Entonces, se está pasando por delante cosas que son muy sensibles y que en este minuto no corresponden. Por lo tanto, no es un tema de libertades. Primero tenemos los deberes y el primer deber es el deber constitucional y a ese es al que hay que atenerse. Lo segundo, se tiene que llegar a todas las personas que lo requieren, y esto no le sirve a todo el mundo y, por lo tanto, hay que buscar algo que es mejor, y para eso nuestros impuestos ya están».

Consultado por el respaldo popular con el que cuenta el proyecto de retiro de los fondos de las AFP, aclaró que, en su opinión «las personas están a favor del proyecto porque necesitan dinero ahora, como sea, cualquier tabla de salvación».

En dicho escenario, insistió en que «el tema es solamente de quórum constitucional, nada más, y se tiene que resolver de la forma institucional. No nos podemos saltar la institucionalidad; si se pierde la institucionalidad se pierde el estado de derecho y después podemos hacer cualquier cosa. No es bueno, en este minuto, hacer eso, y tampoco si no fuera la única condición», sumando al respecto que «hay otras situaciones alternativas: lo que hay son recursos disponibles del Estado de todos nosotros que en forma solidaria se pueden entregar a todos los que lo necesiten; eso es lo que tenemos que usar primero antes que entrar a sacar los que están previsto para otra situación. Pero si esa es la decisión ese es el voto soberano y se obtienen los 2/3, muy bien, no hay ningún problema, pero no nos saltemos la institucionalidad».

Camino al Tribunal Constitucional

Otro aspecto espinoso vinculado al proyecto se relaciona con la consulta o presentación que los opositores a la propuesta -y/o el Gobierno- puedan hacer al Tribunal Constitucional sobre la legalidad del quórum de 3/5 utilizado para su aprobación, ante lo que subrayó que «básicamente lo que el Tribunal Constitucional podría decir es que se requiere los 2/3 y ese es el tema de fondo».

Sobre qué hacer ante el TC, añadió que «si se pudiera hacer una consulta, sería lo óptimo y eso se podría resolver rápidamente, y si no, se tendrá que hacer la presentación correspondiente. Pero no podemos saltarnos un paso tan de fondo«.

Asimismo, afirmó que él, como senador enviaría la consulta el TC: «Por supuesto, porque debemos tener claridad de lo que estamos haciendo. Hay reglas muy claras y precisas, no las podemos saltar y eso es lo más importante porque o si no se pueden producir problemas. Para validar se requieren los 2/3 y si están, muy bien, quedará validado, pero primero, los 12 mil millones de dólares que tenemos que poner a disposición de las personas, eso es lo que tenemos que discutir antes y ponernos de acuerdo ahora».

Eso sí, aclaró que «la revisión del TC es solamente para pronunciarse respecto al quórum necesario para la reforma, nada más; no dice ninguna relación con la AFP, no dice nada en relación con lo que se está haciendo (en el Congreso)».

Sobre cuál podría ser la consecuencia de la consulta al Tribunal, Pugh explicó que «en ese sentido se valida completamente lo que se está haciendo», volviendo a hacer hincapié en que «no nos podemos saltar las reglas y eso es muy importante. Hay reglas precisas y claras que hay que cumplir. Pero los dineros, por otro lado, que sí alcanzan a toda lo población, sí están disponibles. Hay que agilizar esos dineros y eso no está ocurriendo».

No juntar peras con manzanas

Junto con reiterar que «las personas requieren dinero en estos momentos», mencionó que «efectivamente estamos entrampados con un problema en algún caso burocrático y en un caso que el alcance no les llega a todos, eso es lo que hay que resolver; pero dineros hay, y que es mejor usar los dineros frescos que se pueden recibir instantáneamente sin comprometer los recursos propios«, reconociendo por otra parte un retraso en la respuesta del Estado, señalando que «si hay algo que hace mal el Estado, por ejemplo, es manejar los datos: si esto de que tengan que pedirle a las personas toda la información de nuevo, el Estado ya tiene toda la información de las personas. Entonces, hemos fallado con llegar con ayuda que ya tenemos«.

Además, fue enfático en afirmar que es necesario separar, por una parte, el apoyo necesario a través de recursos frescos en medio de una crisis humanitaria, de los procesos vinculados al apoyo o rechazo al sistema de AFP.

«Hay que separar las dos cosas. El problema ahora son recursos frescos para ayudar a una crisis humanitaria que se ha generado de una crisis sanitaria. No mezclemos el modelo … Ese es el problema cuando se juntan las dos cosas: tenemos que hacernos cargo de una realidad de ayudar a personas que lo están pasando muy mal y que necesitan dineros frescos ahora. No mezclemos con lo otro, que va a generar mucha más polarización».

- Publicidad -
- Publicidad -spot_img

Lo más reciente

La Navidad es esperanza

Es un hecho de alcance mundial. Creyentes y no creyentes no son indiferentes a su acontecimiento. Por momentos, el sentido...

Los destacados del día