«Son muchos y exigentes los problemas que debemos enfrentar, los desafíos que debemos asumir y las oportunidades que debemos impulsar. Pero quiero compartir con todos ustedes, las que serán nuestras principales prioridades, tareas y compromisos durante los próximos 20 meses de Gobierno«.
Esas fueron las palabras del Presidente Sebastián Piñera para introducir la dura labor de cara a la cuenta regresiva de su Gobierno, teniendo en consideración de que en su mente parece estar instalada ya la noción de que el actual gabinete será el que lo acompañe en la, para él, más dura parte de su mandato: la encargada de enfrentar la actual sucesión de crisis que han hundido al país, y de encontrar la respuesta que permita hacerles frente y cimentar un legado real que intente equilibrar el desastre de los pasados 9 meses.
Fueron saludos de rigor y breves agradecimientos para entrar en la enumeración de las tareas fundamentales e indispensables que impuso a sus ministros y a sí mismo:
«Primero: Seguir enfrentando con rigor, eficacia y responsabilidad la pandemia del coronavirus. Seguir protegiendo la salud y la vida de todos nuestros compatriotas. Y seguir consolidando la mejoría sanitaria, que ya completa más de 6 semanas».
«Segundo: Fortalecer y desplegar en plenitud la Red de Protección Social, para proteger durante esta emergencia los empleos de los trabajadores, los ingresos de las familias, la sobrevivencia de las Pymes y el abastecimiento de alimentos, medicinas y otros bienes y servicios básicos, que son esenciales para la dignidad y calidad de vida de nuestros compatriotas».
«Tercero: Impulsar con mucha fuerza la recuperación de nuestro nuestra economía y país, para proteger en forma permanente la calidad de vida y las oportunidades de futuro de todos los chilenos. Esto exige recuperar nuestra capacidad de crear empleos y mejorar los salarios. Recuperar nuestra capacidad de crear nuevas oportunidades para las Pymes y emprendedores. Recuperar nuestra capacidad de innovar, emprender e invertir. En pocas palabras, poner en plena marcha a nuestro país«.
«Cuarto: Impulsar la segunda etapa de la Reforma a nuestro Sistema Previsional que permita no solo mejorar las pensiones de todos, y especialmente de las mujeres, clase media y adultos mayores no valentes, si no también introducir reformas estructurales al a nuestro Sistema de Previsión Social».
«Quinto: Asegurar el orden público y resguardar la seguridad ciudadana, para que la delincuencia y la violencia retrocedan, y la seguridad y la paz avancen, en beneficio de las libertades y calidad de vida de todas nuestras familias y compatriotas».
«Sexto: Garantizar la realización transparente, pacífica y participativa de las 7 elecciones que enfrentaremos entre octubre de este año y diciembre del próximo, incluyendo el Plebiscito Constitucional del 25 de octubre de este año, como corresponde a la hermosa tradición democrática de nuestro país».
En su discurso, el Mandatario recalca que todas ellas «son prioridades, tareas y compromisos extraordinariamente exigentes urgentes y desafiantes«, por lo cual convoca «a este nuevo Gabinete y a todo Chile Vamos, a emprender esta nueva etapa de Chile y de nuestro Gobierno con un verdadero espíritu constructivo con unidad, convicción y responsabilidad».
Además, reiteró, como lo ha hecho el último par de meses, su llamado al trabajo colaborativo con los parlamentarios y la oposición, pidiendo «también, con convicción y humildad, la colaboración y aportes, a través del diálogo y los acuerdos, a la Oposición y a todos los parlamentarios», para finalmente, hacer extensivo su llamado «la comprensión, unidad y colaboración de la Sociedad Civil y de todos los chilenos y chilenas de buena voluntad para superar esta emergencia y volver a caminar con fe, convicción y esperanza«.
Alusiones lógicas, porque desde ahora en más a su Gobierno ya no le queda tiempo para sacar a flote al país, para recuperar la viabilidad económica de cada uno de los chilenos y las empresas nacionales pero, por sobre todo, luchar por dejar un legado realmente rememorable de su gestión, como ha sido siempre su más profundo deseo.
La cuenta regresiva de los 20 meses ya comenzó.