Durante la Guerra del Pacífico, acontecida entre 1879 a 1883, muchos(as) chilenos (as) dieron su vida en los campos de batalla en que se libró este conflicto. Como suele suceder, la historia ha sido injusta que aquellos(as) que pasado a la inmortalidad, quedando en el olvido colectivo. Tras el Combate Naval de Iquique del 21 de mayo de 1879, miles de personas se enlistaron en el Ejército con el fin de participar en las campañas de la guerra, emulando la gesta de Arturo Prat y su tripulación.
Cabe destacar que al igual que muchas ciudades, Concepción no estuvo ajena a la guerra. De hecho, un grupo de penquistas de las más diversas profesiones y estratos sociales decidió de manera voluntaria formar el “Batallón Cívico Movilizado Concepción”, con el fin de unirse a la lucha. La génesis del batallón se materializó en enero de 1880, incorporándose oficialmente al ejército a mediados del citado año.
El regimiento se inició con 181 efectivos, llegando a septiembre a 781 hombres en 1883, participando en las campañas terrestres de Lima y la Sierra. Se destacaron, por ejemplo, en las batallas de Chorrillos y Miraflores, entre otros enfrentamientos.
La unidad fue dirigida por el coronel José Seguel la Campaña de Lima, para luego pasar al mando del teniente coronel Herminio González, durante la célebre campaña de la Sierra. El año 1883 sería decisivo pues participaron en la Batalla de Huamachuco, dando el golpe de gracia ante las fuerzas de Andrés Avelino Cáceres y con ello el final de la guerra.
Posteriormente conformaron la “Sociedad de Veteranos del 79” en Concepción, con el fin de auxiliarse mutuamente, además de tener una base económica para solventarse. Se instalaron en una vivienda en el Parque Ecuador, cerca del sector de La Cascada. Por este motivo la calle que se encuentra en este parque se denomina “Veteranos del 79″. Cabe recordar que muchos(as) veteranos(as) de la guerra no tuvieron un buen pasar, quedando con heridas tanto físicas como psicológicas y fallecieron en la más completa indigencia y olvido.