Sigue la teleserie de desavenencias entre el gobierno chileno que encabeza Sebastián Piñera y el de Argentina que lidera Alberto Fernández, luego de una teleconferencia que realizó este último con un grupo de dirigentes de la oposición chilena y en la que los exhorta a unirse para “recuperar el poder”.
Así queda de manifiesto con la respuesta entregada por Chile al gobierno de Buenos Aires, debido a que el canciller chileno Teodoro Ribera citó al encargado de negocios de Argentina en Chile, Carlos Mascía, para “presentarle la profunda extrañeza” ante las palabras de Fernández hechas el pasado 24 de abril las que fueron calificadas como “una injerencia en los asuntos internos”.
El comunicado de la cancillería chilena que fue emitido la tarde del domingo señala que “a juicio del Gobierno de Chile, tales afirmaciones no facilitan ni contribuyen a continuar avanzando en una agenda bilateral que ha sido frutífera y que se ha desarrollado bajo diversos gobiernos en los dos países”.
En ese sentido, el comunicado del Gobierno chileno sostiene que “Chile mantiene su disposición a continuar trabajando por intereses comunes en el marco de un diálogo positivo y respetuoso entre ambos países”.
Las palabras expuestas por Fernández y sacaron “roncha” en La Moneda fue la petición de los líderes opositores a Piñera a superar las diferencias y trabajar conjuntamente para regresar al poder que en este momento está en manos de la derecha chilena.
“Lo que le falta a Chile es que vuelvan a unirse, que zanjen diferencias para poder recuperar el poder en favor de los chilenos”, fue la recomendación que hizo el mandatario argentino a los líderes opositores con quien tuvo un encuentro vía teleconferencia y en el que estaba presente uno de los políticos más cercanos a Fernández, Marco Enríquez Ominami, como también la expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff y el expresidente de Ecuador, Rafael Correa, quienes forman parte del Grupo de Puebla.
Sin embargo, su arenga fue más allá y dijo que “quiero que ocurra en Chile como ocurrió en Argentina, y quiero que ocurra en todos lados de América Latina para que todos volvamos a tener la tranquilidad de poder gobernar en favor de la gente y no en contra de la gente”.
En plena pandemia del COVID-19, esta discrepancia entre ambos gobiernos no ha sido la única, puesto que hace algunas semanas, el Gobierno de Piñera respondió duramente a Fernández cuando comparó la menor cantidad de contagiados que tiene Argentina con respecto a países de la región como Chile y Brasil.
Esto motivo a La Moneda a salir rápidamente al paso y elaboro un informe interno para contrastar las cifras entregadas por el jefe de Estado argentino, bajo el nombre de “Coronavirus: Chile versus Argentina” en donde se señala que resultaba lógico que Chile tuviera más casos de COVID-19 confirmados producto de la cantidad de testeos que se hacen son más masivos.
En la conferencia del grupo de Puebla, según un comunicado de la presidencia argentina, habrían participado varios destacados miembros de la oposición chilena como el senador PS, José Miguel Insulza y la diputada del PC, Camila Vallejo; el presidente del PS Álvaro Elizalde; el senador PPD, Guido Girardi; el excandidato presidencial en los pasados comicios, Alejandro Guillier; y varios exministros del gobierno de la actual alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet.