La guerra interna de Chile Vamos tuvo una pausa, al menos verbal, durante la conmemoración de los 30 años del retorno a la democracia en La Moneda.
Verbal, porque en cuanto a gestos, el quiebre entre los líderes de los dos principales partidos del oficialismo quedó graficado hasta en el protocolo aplicado por Palacio para prevenir cualquier mal entendido.
Instalados en al primera fila de los invitados, Desbordes y Van Rysselberghe quedaron separados por su pares del PRI y Evópoli, y en momento alguno se dirigieron la mirada. Y al final de la ceremonia, cuando el Mandatario llamó a las autoridades a posar junto a él para la foto oficial, ambos fueron estratégicamente ubicados a cada lado suyo, nuevamente para tratar de mostrar alegría y unidad, la cual se deshizo apenas terminó la sesión.
Durante las declaraciones mientras los invitados se retiraban, el pacto de desconocimiento mutuo se extendió a las declaraciones.
Así, Mario Desbordes, se refirió a las palabras de Piñera, señalando que, desde octubre, «la democracia ha estado en riesgo en algunos minutos, eso es así, y tenemos que estar muy conscientes de eso», añadiendo que «no podemos volver al escenario previo al 15 de noviembre, y para eso tenemos que arremangarnos la camisa y trabajar con mucha fuerza los que tenemos cargo de responsabilidad».
Luego de lanzó sus dardos contra el líder del Partido Republicano, José Antonio Kast, en relación a sus reiterado comentarios acerca de la violencia de las manifestaciones con la opción “Apruebo” del plebiscito que se realizará el 26 de abril próximo, respecto de lo cual manifestó que “la mayoría de los que hoy están ejerciendo la violencia, los encapuchados, los que incendian, no tienen nada que ver con el Apruebo, no son personas que estén por el Apruebo”.
Añadió a continuación que “cuando algunos pretenden, faltando a la verdad como José Antonio Kast, decir que los violentos, los encapuchados, están por el Apruebo, eso es mentirle a la ciudadanía. A esa gente no le interesa el plebiscito, no le interesa ni el Rechazo ni el Apruebo. No quieren un proceso constituyente y por tanto, no engañemos a la gente con frases como esas”.
Asimismo, declaró que todas las “primeras líneas” en la medida que utilicen la violencia son “condenables”, precisando que “los que van a la primera línea a manifestarse de forma pacífica no hay problema; el que usa la violencia como herramienta política debe ser condenado. El que se jacta de las violaciones a los derechos humanos como vimos en algunas personas de manera grosera en la marcha del Rechazo, debe ser condenado con fuerza (…) No podemos mirar a unos de una manera y a otros de una manera distinta, tienen que ser la misma vara para todos”.
En tanto, la presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, coincidió con Piñera en que «hoy día nosotros tenemos un país democrático, pero hay que cuidarlo, y hay que hacerlo básicamente restituyendo también el orden público, porque la democracia se deteriora en la medida que el orden publico se deteriora».
«La oposición me parece que va en el sentido incorrecto. Hoy (…) necesitamos recuperar Chile, tenemos que volver a lo que éramos antes del 18 de octubre, corrigiendo aquello que haya que corregir; pero no me parece que deban marginarse de un acto como este», añadió la senadora.
Y junto con hacer hincapié en que «hoy tenemos un país que hace 30 años era completamente distinto al país que tenemos ahora», se refirió a la amenaza de acusación constitucional en contra del ministro Blumel, comentando que «parece que la oposición dice ‘o cambian al director general de Carabineros o le hacemos una acusación constitucional al ministro del Interior’; eso en cualquier parte se llama chantaje, y el chantaje es inaceptable; pueden hacer una acusación constitucional, está dentro de las reglas, pero no un chantaje; eso de verdad no es presentable en ninguna parte».
Caramori: «Anteponer al país»
Ajeno a la disputa de los presidentes de la UDI y RN, el timonel del PRI, Rodrigo Caramori, destacó las palabras de Presidente Piñera y la mención al fallecido expresidente Patricio Aylwin, en el sentido que “Chile es un solo país que lo componemos todos, más aún en los tiempos difíciles que estamos viviendo”.
“Hoy día se requiere más que nunca la unidad entre todos los chilenos sin distinción política de ningún tipo. Valoramos los tiempos de la Concertación, donde Chile avanzó de una manera considerable, siendo un período fecundo. Por lo tanto, hacemos un llamado a rescatar lo que hemos hecho entre todos los sectores políticos y toda la sociedad chilena”, declaró.
A juicio de Caramori, “a pesar de que aún falta mucho por construir y muchas injusticias por rectificar, Chile ha avanzado y somos nosotros mismos los responsables de seguir avanzando”.
“Todos los sectores ideológicos debemos pensar y anteponer al país por sobre la pequeñez política y por sobre los intereses particulares de cada uno”, insistió.
