Todo eso, y más, es la COP25 que, bajo la presidencia de Chile, se realiza desde el pasado 2 de diciembre en Madrid.
A dos días del cierre de la cumbre del clima, vale la pena preguntarse qué sería necesario que ocurriera para hablar de una COP exitosa. Como explica Ricardo Bosshard, director de WWF Chile, los aspectos básicos que deberían resolverse, son los siguientes:
– Un aumento exponencial de la ambición de los compromisos climáticos de los países, alineados con la meta de no superar un aumento de 1.5°C, tal como ha advertido la ciencia.
-Resolver las negociaciones pendientes sobre el Libro de Reglas y el Artículo 6, relativo a transacciones de mercado y no mercado entre países, para permitir la entrada en vigencia efectiva del Acuerdo de París.
– Respecto al mencionado Artículo 6, los Derechos Humanos, y en particular los derechos de los pueblos indígenas, deben quedar resguardados en el mismo texto. Esto es algo particularmente importante de incluir para países como Chile, en donde el cambio climático puede agudizar las inequidades en el futuro.
– Involucrar formalmente la participación de los actores no estatales, incluyendo a la sociedad civil (jóvenes, pueblos indígenas, ONGs, científicos y académicos) y la renovación del Marrakech Partnership.
– Incluir en la llamada Overarching Decision 1cp25 – la Decisión General- conceptos clave como ecosistemas para las llamadas soluciones basadas en naturaleza incluyendo océanos (para poder hablar efectivamente de una COP Azul) y además de justicia climática y NDC –los compromisos climáticos de cada país- mejoradas y no solo actualizadas.