Las 5 condiciones auditivas:
Audición Normal: Se pueden oír sonidos suaves por encima de los 20 decibeles lo que equivale a escuchar el canto de los pájaros.
Hipoacusia Leve: Se hace difícil entender una conversación en ambientes donde hay ruido o cuando el volumen de la voz es muy bajo. A las personas les cuesta escuchar susurros y la capacidad de escuchar bien está entre los 25 y 39 decibeles.
Hipoacusia Moderada: Es complicado entender una conversación a un volumen normal. En este nivel de hipoacusia, recién se comienza a escuchar bien entre los 40 y 69 decibeles. Ya es necesario el uso de audífonos.
Hipoacusia Severa: El oído en este punto comienza a escuchar entre los 71 y 90 decibles (lo que equivale al ruido de una calle congestionada con bocinazos). Con hipoacusia severa una persona requiere de audífonos o un implante coclear, pues no existe posibilidad de escuchar lo que otra persona dice, solo ruidos fuertes.
Hipoacusia Profunda: Solo se pueden percibir sonidos a partir de los 90 decibeles, solo se perciben ruidos muy fuertes, por lo que se debe recurrir a la lengua de señas, lectura de labios, información visual complementaria y un implante coclear.