Este miércoles, tras una violenta jornada de incendios, barricadas y saqueos, el Presidente Sebastián Piñera, nuevamente salió a hablarle a la golpeada nación, insistiendo con su agenda policiaca o proseguridad pública por sobre la agenda social y las urgentes demanda ciudadanas, es decir sigue apagando el fuego con bencina.

En esta línea el ya cuestionado Mandatario llamó al Congreso para aprobar con máxima rapidez las iniciativas en materia de seguridad y orden público: anti encapuchados, anti saqueos, anti barricadas y habilitar a las Fuerzas Armadas para que resguarden infraestructura crítica.

Piñera destacó que 4.534 carabineros se sumarán en las próximas semanas a las calles para garantizar el orden público y proteger a los ciudadanos.

El Mandatario volvió a anunciar por enésima vez que se adelanta el egreso de las nuevas generaciones de suboficiales y oficiales de Carabineros y la PDI, lo que permitirá incrementar en 2.505 la dotación de efectivos de estas instituciones a partir del próximo lunes.

A ello se sumarán carabineros y policías de reciente retiro y de buenas calificaciones que se reintegran, totalizando 4.534 nuevos efectivos dentro de los próximos 60 días.

“La democracia tiene el derecho y la obligación de defenderse de la violencia con las armas del Estado de Derecho. Llegó el momento de decir basta”, señaló el Presidente Piñera en el Palacio de La Moneda.

“Todos los que creemos en la democracia y amamos la paz debemos unirnos y condenar categóricamente, y sin ninguna ambigüedad ni tibieza, la delincuencia organizada y la violencia criminal”, enfatizó un incómodo Piñera.

“Chile y los chilenos necesitamos mejores herramientas para combatir esta violencia criminal. Por eso, estos proyectos que están en el Congreso deben transformarse ahora, en cuestión de días, en leyes que permitan fortalecer el Orden Público y la Seguridad de los Ciudadanos, y mejorar la eficacia de la labor de nuestras policías”, aseguró el jefe de Estado.