El Gobierno confirmó que está estudiando la posibilidad de recurrir al Tribunal Constitucional ante la lista que elaboró La Moneda sobre 17 proyectos de ley que han avanzado con indicaciones que son “inadmisibles”, porque se vulneran las normas de iniciativa exclusiva del Presidente de la República.
Así lo manifestaron la vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, y el ministro del Interior, Andrés Chadwick, ante lo que consideran una abierta inconstitucionalidad de iniciativas parlamentarias que son propias del Ejecutivo.
La portavoz de Palacio dijo que “nosotros a través del ministro (Gonzalo) Blumel se lo hemos presentado a ambos presidentes, tanto de la Cámara de Diputados como del Senado, es importante que podamos respetar las tramitaciones de los proyectos no solamente dándole la cabida efectiva a los proyectos que están con suma urgencia”.
En ese sentido, explicó que “cuando esas facultades -del Poder Legislativo y el Ejecutivo- no se respetan por cierto que el Presidente de la República tiene la facultad para poder para llevar adelante y tomar la decisión que en rigor la Constitución y las leyes les permiten”.
Ante la consulta respecto a que si estos proyectos serán enviados al TC, la ministra Pérez explicó que se está estudiando y “que es propio de las facultades que tiene el Poder Ejecutivo”.
“Es importante que en un país democrático y republicano como el nuestro se respeten las facultades que por Constitución y también por leyes tienen cada uno de los poderes del Estado. En nuestro país existe separación de los poderes y cada uno tiene el mandato de cumplir con lo que la Constitución determine”, precisó.
Y agregó que como Gobierno “creemos que efectivamente existen proyectos de ley importantes, sobre todo aquellos que irrogan gasto fiscal y que no son propios de la tramitación que deben darle como mociones parlamentarias, sino que son propios de las facultades que tiene el Poder Ejecutivo”.
Por su parte, el titular del Interior aseguró que está en estudio la posibilidad de recurrir al TC, porque “es muy importante que las atribuciones y disposiciones constitucionales sean cumplidas, más aún por quienes hemos jurado, ya sea como Gobierno y también cada parlamentario, respetarlas”.
Mencionó que “en ese sentido presentar proyectos de ley y darles tramitación que están más allá de las atribuciones de la Cámara de Diputados o del Senado o que contradicen las atribuciones que la Constitución establece al Presidente de la República, obviamente que debilita el funcionamiento de nuestras instituciones”.
Respuesta de la Cámara de Diputados
Ante el anuncio hecho por el Gobierno, el presidente de la Cámara de Diputados, Iván Flores (DC), fue enfático en señalar su molestia por la decisión de recurrir al TC, indicando que “todo lo que no le gusta al Gobierno lo manda al Tribunal Constitucional”.
“Hay una serie de iniciativas parlamentarias que son buenas para Chile. ¿Cómo no le va a interesar al Gobierno mejorar las condiciones de los gendarmes o que los medicamentos de uso común estén más al acceso de las personas?. ¿Por qué no les pone urgencia en vez de enviarlos al Tribunal Constitucional, convirtiendo a éste en una tercera cámara legislativa?”, señaló.
Explicó que durante la vigencia de la Constitución de 1925, durante gran parte del siglo pasado, las urgencias legislativas tanto de los proyectos enviados por el gobierno como los de origen parlamentario las fijaba el Congreso Nacional, situación que cambió con la Constitución de 1980, que radicó esa facultad sólo en el Ejecutivo.
“Con ello La Moneda ordena la tabla legislativa, es decir los debates que hacemos los define el Gobierno y todas las iniciativas parlamentarias, por buenas que sean, van quedando atrás”, indicó.
Flores recalcó que en estos días se está debatiendo una reforma en la Comisión de Constitución de la Cámara para acotar las atribuciones del TC, explicando que “queremos que el TC sea usado solamente para cuestiones muy estructurales, especiales, y no para cualquier proyecto que no le guste al gobierno de turno”.
“Este es el momento de ponernos de acuerdo y buscar puntos de convergencia, no de diferencia. Que el Gobierno entienda que estos proyectos que son buenos para Chile y son de iniciativa parlamentaria los reconozca así y les ponga patrocinio. Eso es lo que le hemos planteado al gobierno, no que cada vez que tengamos una diferencia lleguemos al Tribunal Constitucional que, si se apega a la pata de la norma, va a decir que es inadmisible y va a desechar un buen proyecto por secretaría”, apuntó el parlamentario.
Finalmente, Flores aseguró que “queremos legislar con debate, no que se pierdan buenos proyectos sencillamente por secretaría”.