“Los juguetes son un reflejo de la cultura, y mientras el mundo sigue celebrando el impacto positivo de la inclusión, pensamos que era hora de crear una línea de muñecas libre de etiquetas,” dijo Kim Culmone, de Mattel.

Estas versátiles muñecas están disponibles en varios todos de piel. Pueden llevar el pelo corto o largo, vestirse con pantalones, falda o pantalones cortos, y tienen tres tipos de calzado, así como gafas de sol y otros accesorios. Estas muñecas de 28 cms “no tienen los labios muy carnosos, ni las pestañas largas, ni la mandíbula es muy ancha. No tienen pecho como Barbie ni hombros anchos como Ken,” cuentan en la revista TIME.

Los padres millenials llevan tiempo protestando por los estereotipos de género en los juguetes, y las compañías jugueteras les han escuchado. Por ejemplo, los disfraces de Disney ya no son para niños y niñas, e invitan a vestirse de Capitán América o de Bella, sin distinguir. Y el año pasado, Mattel comenzó a hacer lo mismo.

El precio debería ser de $29.99, con el eslogan: “una línea de muñecas diseñadas para que entre todo el mundo menos las etiquetas”. Así, la compañía apuesta por el futuro, aunque algunos compradores quizá se sientan alienados. Porque, según una encuesta de Pew Research, el 76% del público apoya que los padres enseñen a sus hijas juguetes y actividades dirigidas a los chicos, pero solo el 64% apoya que sea al revés, que sus hijos juguen y hagan actividades que se asocian a las niñas.