Que el 54% de los camiones que trasladan cargas de alto tonelaje a lo largo del país regresen a sus puntos de origen vacíos, sin contar los que retornan con una alta capacidad ociosa, es un claro indicativo de ineficiencia operativa en la industria del transporte.
Esto se traduce en 6.237 millones de kilómetros recorridos sin carga y representa un consumo innecesario de más de 1.255 millones de litros de diesel, con un costo de casi 695.000 millones de pesos. Dichas cifras repercuten enormemente en la competitividad del transporte, pero también en términos de sustentabilidad: una huella de carbono inaceptable que se genera por las 5,67 millones de toneladas de CO2 que se emiten en los fletes negativos y el deterioro que se produce a rutas e infraestructura de transporte, sin agregar valor a la economía.
En este contexto fue que se presentó oficialmente en Chile la aplicación T-CARGO, cuyo objetivo primario es eficientizar el transporte, acotando tiempos, rebajando costos y permitiendo una colaboración estrecha entre los transportistas y las empresas generadoras de carga.
Matías Feldman, Chief Design Officer de T-CARGO, apuntó incluso más allá: “apostamos fuertemente por la consolidación de los flujos de carga no sólo nacionales, sino en especial los internacionales entre Chile y Argentina, y también los nuevos mercados que esperamos abrir en el corto y mediano plazo, como Brasil o Perú, permitiéndonos ayudar a fortalecer un proceso ya existente en torno a los corredores bioceánicos”.
Modelo de negocio
El proceso es bastante simple y directo. Tanto generadores de carga como transportistas se inscriben gratuitamente en el sitio web (www.t-cargo.cl) ingresando los datos específicos, permitiendo poner en contacto directo a las partes interesadas a través de la aplicación disponible cualquier dispositivo. Lo principal es que no impone precios, sino que estos son acordados entre las partes en función de distancias, tipo y volumen de carga, aunque la aplicación está preparada para actuar de forma inteligente, a partir de su propio aprendizaje. Así, por ejemplo, podrá sugerir en el futuro el valor de fletes para las rutas más frecuentes, en base al historial de operaciones acordadas con los mismos parámetros; es por eso que la plataforma está pensada desde el concepto de la usabilidad web, colocando en primer lugar la experiencia del usuario, buscando darle una interacción sencilla, intuitiva, agradable y segura.
Por otra parte, de existir capacidad ociosa en un viaje, y siempre que se acuerde con el contratante primario, el transportista podrá acordar efectuar otros fletes paralelos aprovechando la ruta, permitiendo así optimizar de mejor manera cada viaje.
“Las ventajas finales son enormes – señaló Feldman –, ya que permitirá al transportista ampliar su oferta y rebajar costos, aumentar sus ganancias y tener la posibilidad de modernizar con mayor frecuencia sus camiones. Y el generador de cargas podrá elegir de forma rápida y eficaz la mejor y más adecuada oferta, además de rebajar sus costos de transporte”.
De esta forma, la aplicación T-CARGO promete revolucionar la industria del transporte automotor de carga, gracias a su eficiente combinación de tecnologías emergentes, el apoyo de un equipo con sólida experiencia en el mercado logístico y la incorporación de los principios de la economía colaborativa, que logran como resultado una solución innovadora a las principales problemáticas de una actividad que, en Chile, recorre 23.100 millones de kilómetros al año, y cuyo rango de acción se extiende a los largo y ancho de todo el cono sur sudamericano.