El protagonista de “Loco por Mary” confesó que no sabía qué hacer y que necesitaba pruebas que no era el fin del mundo. “Ni mi edad ni los antecedentes familiares hacían pensar que podría pasarme algo así”, expone en una entrevista en la que habla de las pruebas médicas que pueden salvar vidas. La resonancia magnética, aparece como un arma a la que urólogos de todo el mundo miran confiando en que sea la bala de plata capaz de poner a raya una enfermedad que ataca a uno de cada seis hombres en Chile y cuyo diagnóstico es poco certero.
La imagen por resonancia magnética, podría ser en un futuro próximo, un método de detección comparable a lo que para las mujeres es desde hace mucho tiempo la mamografía. El equipo del University College of London, ha asegurado recientemente que falta muy poco para confirmar a la resonancia magnética como el camino a seguir por considerarse infinitamente mejor que el tacto rectal, los análisis de sangre y las biopsias. Y es que el análisis de sangre del antígeno prostático (PSA en inglés), se le llega a escapar el 15% de los cánceres y al mismo tiempo descubre muchos que nunca representarán un riesgo serio para el paciente. De hecho, aproximadamente tres de cada cuatro hombres con un nivel elevado del antígeno prostático no desarrollarán cáncer en su vida y muchos se ven obligados a someterse a una biopsia.
Para el urólogo Felipe Balbontín, autor del libro “El legado de Adán, todo sobre el cáncer de próstata”, el examen de PSA cuando es bien utilizado, sigue siendo la manera más sensible de pesquisar el cáncer de próstata. “Personalmente, si tengo sospechas, me inclino a favor de pedirle al paciente se haga el antígeno prostático. De esta manera puedo diagnosticar con mayor precisión y tomar el camino más adecuado: si el examen sale alterado, lo repetimos. Si nuevamente sale alterado solicito una resonancia de próstata (RNM) y si ésta muestra una zona sospechosa, se realiza una biopsia para corroborar. Después de eso podemos indicar un seguimiento activo en casos de cáncer de bajo riesgo o una intervención más activa (cirugía, braquiterapia o radioterapia externa) si es necesario, o control anual, si no hay sospecha”.
El doctor Balbontín, presidente de la Corporación Chilena contra el Cáncer de Próstata, opina que el seguimiento activo es una forma muy efectiva de abordar aquellos cánceres que no presentan riesgos urgentes, tanto en adultos mayores como en hombres de mediana edad tal como lo sugiere la U.S Preventive Services Task Force. “Lo importante es prevenir. No hay que olvidar que la próstata es la principal causa de muerte por cáncer en Chile junto con cáncer de estómago”.
En tanto para el jefe del proyecto en Inglaterra, el doctor Mark Emberton, afirma que alrededor del 90% de los hombres que se hagan la resonancia nuclear magnética antes de llegar a la edad de jubilación podrán respirar tranquilos y olvidarse de la enfermedad. “El cáncer de próstata tiene un crecimiento bastante lento, por lo que, si la imagen de la próstata es perfectamente limpia a los 55 o a los 60 años, es muy probable que nunca lo padezca” indicó
El cáncer de próstata en Chile
Muy común y lo será más
El cáncer de próstata es tan frecuente que es considerado un problema de salud pública a nivel mundial. De acuerdo a las cifras del Ministerio de Salud en Chile, estudios de autopsia realizados en hombres de más de 80 años demuestran que sobre 70% de ellos presentaba un cáncer prostático. Esta enfermedad constituye la segunda causa de muerte por cáncer en hombres, registrando 2.275 fallecidos en 2016. Se estima que 1 de cada 6 desarrollará un cáncer de próstata, pero que 1 de cada 33 morirá por esta causa. Si bien es una enfermedad de alto riesgo, los avances médicos nos permiten reducir la mortalidad de manera significativa si el cáncer prostático es detectado antes de que se propague al resto del cuerpo.
2.300 muertes al año
En Chile, el cáncer de próstata es la causa de muerte de alrededor de 2.300 chilenos al año, mucho más que la cantidad de hombres que muere en accidentes de tránsito y con una mortalidad mayor que el cáncer de mama (1.400 muertes).
Consejos
Todos los hombres mayores de 45 años que tengan factores de riesgo deberían realizarse las pruebas de detección temprana de cáncer de próstata. Entre los más expuestos se encuentran los afrodescendientes y aquellos cuyos parientes de primer grado (padre, hermano o hijo) recibieron un diagnóstico de cáncer de próstata a una edad temprana (menores de 65 años).
75%
Tres de cada cuatro pacientes con cáncer de próstata localizado se curarán. Además, un 80% de los pacientes con cánceres de próstata de baja agresividad y muy localizados sobreviven más de diez años sin que sea necesario aplicar tratamiento. Más información en “El legado de Adán, todo acerca del cáncer de próstata” en www.miprostata.cl