La gravísima crisis sanitaria provocada por el más extenso corte de agua provocado por la sanitaria ESSAL (Aguas Andinas, Aguas Barcelona y que preside el DC Guillermo Pickering) en Osorno, ha significado la apertura de una investigación judicial, por ello la cuestionada mal llamada «sanitaria», arma un poderoso equipo jurídico para defenderse de lo indefendible, pero como política y negocios en Chile van de la mano, la empresa sedujo y contrató -quizás por varios miles de millones- al que hasta anoche era el coagente chileno ante La Haya por el juicio por las aguas del río Silala, el abogado y exsubsecretario de Justicia de Piñera en su primer gobierno y expresidente del Consejo de Defensa del Estado entre los años 2014 y 2017, Juan Ignacio Piña que ahora asume como abogado de ESSAL, lo que evidencia que Piña ha preferido botar los intereses del Estado en la principal corte internacional por defender a una empresa que literalamente se ha burlado y ha jugado con la fe pública, dejando entrever que lo que el defendió en su momento -los intereses del Estado- solo son «una cuestión de monedas más» siguiendo el ejemplo bíblico de Judas.

La renuncia de Piña a su cargo de coagente se materializó anoche ante el propio canciller Teodoro Ribera, confirmó la cancillería.

El abogado, a través del estudio jurídico Balmaceda, Cox & Piña asesora a ESSAL.