Este miércoles, el ministro de Defensa, Alberto Espina (RN), aprovechó de referirse a las últimas diligencias que lleva adelante la ministra en visita, Romy Rutherford, quien ayer ordenó la detención del ex comandante en jefe del Ejército, Humberto Oviedo; en el marco del caso “Fraude al Ejército”.
Espina dijo que son “delitos extraordinariamente graves” y nuevamente pidió que “lo que corresponde es que la justicia haga su tarea” y espera que se apliquen “las más duras sanciones”.
Pero ahora, el ex senador RN, instaló que el mal uso de los Gastos Reservados: “Quien los utiliza mal le causa un gravísimo daño a la seguridad exterior del país y defensa de la soberanía”.
Ahora bien, lo que no dice Espina, es que NO solo las FFAA usan Gastos Reservados, ya que su propio ministerio (Defensa), la Presidencia de la República; Ministerio del Interior; Ministerio de RREE; Dirección de F,ronteras y Límites del Estado, Carabineros, PDI y Agencia Nacional de Inteligencia, ANI; tienen esta asignación.
Según Espina: “Los gastos reservados son muy importantes para la seguridad exterior de Chile y sirven para financiar las actividades de inteligencia que permitan al país protegerse y anticiparse ante amenazas. Quien los utiliza mal le causa un gravísimo daño a la seguridad exterior del país y defensa de la soberanía”.
El ministro aprovechó de repasar que en enero pasado, el Gobierno presentó un proyecto de ley “que cambia integralmente la forma en cómo se asignan los gastos reservados, y que ya fue aprobado de forma unánime en la Cámara de Diputados” y espera que con la suma urgencia puesta por el Gobierno “el Senado lo despache lo más pronto posible. La ciudadanía quiere soluciones y este proyecto de ley es una solución. El objetivo es que la ciudadanía tenga la tranquilidad de que, con la nueva ley, los gastos reservados deberán ser bien utilizados”, continuó, dando a entender que estos Gastos Reservados nunca han siendo bien utilizados.
Bajo la nueva norma, en trámite legislativo, quien haga mañ uso de estas asignaciones, tendrá penas de hasta 20 años de cárcel.
