En 2017, mientras se realizaba el Festival “Hecho en Casa”, el artista hiperrealista Luis Núñez pintó el mural «Lastarria Patrimonial» en la fachada de edificio Rosal N°312 en 2017, obra que fue autorizada por el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN). La autorización fue por seis meses y luego debía ser borrado para que la fachada del edificio, obra del arquitecto Italo Sasso, está catalogado como inmueble de conservación histórica, en Zona Típica.
El mural representa a algunos de los habitantes que forjaron la historia de la ciudad y del sector, como Victoria Subercaseaux y José Victorino Lastarria, personaje histórico que le otorga nombre al barrio.
El 21 de junio de 2018, el reconocido sociólogo Fernando Ossandón Correa escribió: “Una encuesta elaborada por los gestores del festival reveló que, en el período, los comerciantes vieron incrementadas sus ventas en cerca de un 33% y que un 63,6% de los encuestados ha notado un aumento de personas en el barrio. Por otro lado, el 100% de los encuestados consideran que el mural es un aporte al barrio y lo evalúan con nota 6,5”, es decir contaba con amplio apoyo ciudadano.
“La explicación de la Municipalidad de Santiago resulta ser legal, pero no por ello, menos burda. El mural había pasado a ser patrimonio cultural del barrio Lastarria; una pena q el mecanicismo del municipio y su alcalde, además de los propietarios, no fueran capaces de valorarlo”, escribió en su cuenta de Twiter, Cristián Leporati, director de la Escuela de Publicidad de la UDP.
Ahora bien, el hecho concreto es que ya está siendo borrado y el edificio recupera el blanco, una tentación para los rayadores de muros, que en el Barrio Lastarria y Bellas Artes, dan fe de que nada y menos una ley hacer que los edificios no estén pintarrajeados con textos ilegibles, palabrotas incluso obscenidades, pero en ello el estricto alcalde Felipe Alessandri, no pone la mano legalista y pasan los meses con fachadas de uno de los barrios más visitados de la capital, muestren esta fea cara. Así las cosas queda la duda si al alcalde de Santiago, a la Junta de Vecinos del B. Lastarria, les gusta la fealdad, porque no se explica de otra forma –salvo el cuidar la sacrosanta fachada blanca del edificio de Sasso-, y que ahora será la tela para rayados.
A continuación una muestra gráfica de los edificios rayados en el entorno inmediato al edificio del mural, fotos tomadas durante la mañana de este miércoles 19 de junio.