El Gobierno y Chile Vamos salieron a blindar una vez más al cuestionado subsecretario de Redes Asistenciales del Ministerio de Salud, Luis Castillo, luego que se conociera el envío de mensajes de Whatsapp en donde pedía la salida de funcionarios por razones políticas.
Hay que mencionar que durante la mañana del lunes, un grupo de parlamentarios de Atacama -la senadora Yasna Provoste y los diputados PS, Daniella Cicerdeli y Juan Santana- pidiera en La Moneda la cabeza de Castillo ante lo que consideraron como una persecución política de funcionarios de la salud. Luego se dirigieron a la Contraloría para hacer lo mismo.
Ante esto, la vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, salió a defender la gestión que está realizando el subsecretario, minimizando la petición de los parlamentarios opositores al señalar que “no es la Contraloría ni otro poder del Estado los que pueden arrogarse la facultad exclusiva del Presidente de la República, que es finalmente designar a quienes lo acompañan en su gabinete”.
Además, la ministra señala que Castillo “está trabajando en lo que son los mandatos de nuestro Presidente que es sacar adelante la salud pública de nuestro país”.
Consultada respecto a que si el Gobierno avala la forma de actuar que ha tenido Castillo, Pérez buscó la forma de explicar los mensajes enviados y señaló que “tal como lo ha señalado el propio subsecretario Luis castillo, que no es el emisor de aquellos whatsapp, dice relación a personas que están con sumarios y acá independiente del color político que pudieran tener funcionarios de cualquier repartición lo importante es que hagan su trabajo y lo hagan bien, en pro de la ciudadanía y en beneficio de todos los chilenos”.
Por su parte, la senadora y timonel de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, consideró una “majadería” la insistencia de la oposición de pedir la cabeza de Castillo, añadiendo que lo que ha hecho es “hacer bien su trabajo, es preocuparse que anden rápido personas que están sumariadas y pedir que quienes están en cargos que son sensibles para el gobierno son personas que les importa que a este gobierno le vaya bien”.
En una línea más dura, la presidenta del gremialismo a pesar que no dijo fehacientemente que compartía la decisión del subsecretario, efectivamente “lo encuentro razonable en el sentido que hay cargos que tienen relación con la comunidad y que tengan relación en temas que son complejos y conflictivos, personas que tengan el corazón en este Gobierno”.
“Si hay más personas, no veo ninguna razón para colocar a alguien que es del Partido Comunista en un Gobierno de derecha me parece absurdo. Creo que es absolutamente legítimo, porque yo no pondría a nadie en un cargo, ni encargado con la comunidad, ni a cargo de recursos humanos, sí lo pondría en otras cosas donde pueden tener competencias, pero en cargo que son sensible y yo personalmente pondría a personas que les importa el Gobierno y que esperan que le vaya bien”, afirmó.