La ONG Greenpeace puso en alerta que los incendios que afectan a la Región de Aysén, especialmente a la localidad de Cochrane, demuestran los efectos del cambio climático y que se transformará en una nueva forma de combustible para la propagación de siniestros forestales.
El organismo señaló que los incendios superan en un 22.000% a los registrados en la pasada temporada y en un 1.600% a los incendios de los últimos cinco años.
Actualmente, el siniestro más grande del país se encuentra en Aysén y equivale a un 60% de la superficie que se quemó en el gran incendio que afectó la zona de las Torres del Paine durante varias semanas del 2011 al 2012.
“Estamos hablando de un área equivalente a más de 170 veces el Estadio Nacional. Es una situación alarmante que afecta una zona especialmente sensible para los ecosistemas y una región ícono para nuestra Red de Parques Nacionales”, señaló la coordinadora del área de campañas de Greenpeace, Estefanía González.
En este contexto, desde la ONG ambientalista destacaron como elemento clave para la situación de emergencia que vive la región las temperaturas extremas e históricas que se han dejado sentir en la zona en las últimas semanas, donde en Coyhaique se llegó a 35.7°C, mientras que en Cochrane se registró 36.1°C, superando el récord de 35.0°C de enero de 2013.
“Por supuesto que estas temperaturas completamente fuera de lo normal han actuado como un verdadero combustible para la generación y expansión de estos incendios. Hay que hacerse la idea de que los siniestros que solemos ver en la zona central y sur del país ahora también serán una realidad en el corazón de nuestra Patagonia”, advierte González.
Primer registro de la operación del #TenTanker en #Cochrane combatiendo #IncedioForestal #ColoniaSur@adnradiochile @Tele13_Radio @biobio @Mega @chilevision pic.twitter.com/dgUDrk8Rll
— Cochrane (@MunicipCochrane) 12 de febrero de 2019
