Su humana, Lexi Smith, de 26 años, describe a Wiley como “25 kilos de amor juguetón, torpe, presumido, hambriento, cariñoso, curioso, salvaje, tonto y feliz. No hay cantidad de fotos que puedan captar del todo lo que él es y lo que significa para mi, es mi mejor amigo.”
Lexi, que vive en Colorado, encontró a Wiley en Oklahoma en el día de San Patricio del año pasado, y aunque su marca le hace resaltar, no es la razón por la que lo eligió. “Era parte de una camada de 11 y 8 eran machos, así que me costó elegir. El corazón estaba ahí, pero no formado del todo, y además las manchas de los dálmatas cambian cuando crecen. Lo elegí porque el criador me dijo que dormía, comía y se acurrucaba, así que teníamos mucho en común.”
Bueno, ahora el cachorrito ha crecido y se ha desarrollado. “Wiley tiene más personalidad en su cuerpo que cualquier perro que haya conocido.””
Smith afirma que hacer senderismo es una de sus actividades favoritas. “Tenemos suerte de vivir en Colorado y tener lugares bellos y enormes en los que jugar y explorar. Le encanta salir de excursión o ir a los gigantes parques para perros de aquí.”
“Los rasgos de dálmata de Wiley me hacen reír todo el rato. Me acabo riendo de su cabezonería, pero es parte de él. Si no puedes reírte de ello y usar la creatividad para encontrar una solución y buscar como entrenarlo para quitarle esos rasgos traviesos, la vida con un dálmata sería un desafío.”
Pero no cambiaría la cabezonería ocasional de Wiley por nada del mundo. “He tenido mucha suerte con él, tiene buen corazón y no me refiero al de su nariz. Quiere a todos a quienes conoce y le encanta hacer nuevos amigos. Ha sido relativamente fácil entrenarlo y es el mejor compañero de aventuras. Requiere mucha atención y casi siempre está pegado a mi cadera, pero por eso lo adoro.”
Y su dueña no es la única que aprecia lo especial que es Wiley. Gracias a su instagram que no para de crecer, el dálmata también es reconocido en la calle.
“Hay gente que lo reconoce como ‘ese perro de internet’, otros ven su nariz-corazón, pero muchos se sorprenden por ver un dálmata, porque hace mucho que no ven uno o nunca vieron uno en persona. Eso es lo que más oigo cuando salgo con Wiley.”
Su decisión de compartir a Wiley con internet comenzó con su amor por la fotografía. “Siempre ha sido algo con lo que he jugado y experimentado, y de repente tenía un cachorro adorable que es el modelo perfecto. Crearle una cuenta dedicada a él específicamente parece un modo genial de almacenar todas las fotos que le hago y ver su crecimiento.”
“Comenzó para ver cómo crecía y guardar recuerdos, para mi y algunos amigos. Cuando comenzó a crecer, me pregunté cómo sería si llegara a 5000 seguidores. Nunca imaginé que llegaría a lo que es ahora. Y SIGUE CRECIENDO. Estoy sorprendida pero agradecirda. Ha sido una aventura divertida.”
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