Este viernes tanto la Cámara Baja como el Senado levantaron sus sesiones sin un presupuesto aprobado, por lo que la administración de Donald Trump sufrirá un “shutdown” parcial o cierre parcial administrativo, que comenzará a regir a partir de la medianoche de este sábado (22.12.2018), el Gobierno de Estados Unidos protagonizará un nuevo cierre parcial administrativo lo que se traduce en que la administración carecerá de fondos para seguir funcionando.
Este será el tercer «shutdown” desde que Donald Trump asumió la presidencia, en enero de 2017. El mandatario postergó sus vacaciones en Florida para quedarse en Washington mientras se negocia el nuevo presupuesto. Sin embargo, no tuvo suerte. «No hay acuerdo”, dijo a la prensa el congresista republicano Mark Meadows, quien dijo que 1.600 millones de euros para el muro fronterizo «no son aceptables”, señala un cable de la la alemana DW.
La negociación entre republicanos y demócratas había llegado a un punto muerto a raíz de la exigencia del presidente de EE.UU., Donald Trump, de que el proyecto de presupuestos incluyera una partida de más de 5.000 millones de dólares para el muro. De hecho, los dos partidos alcanzaron el jueves un acuerdo que no incluía fondos para el muro, pero Trump decidió vetarlo.
Cierre largo
No hay claridad sobre cuánto durará el «shutdown”, pero las perspectivas son poco halagüeñas. Si bien el Congreso volverá a sesionar al mediodía de este sábado en busca de un acuerdo, y tras bambalinas hay negociaciones entre parlamentarios, el vicepresidente Mike Pence, el asesor de Trump Jared Kuschner y otros altos cargos de la Casa Blanca, se augura un cierre más largo que los anteriores.
Esto porque, a diferencia de los otros cierres, que duraron apenas unas horas en febrero y tres días en enero de 2018, Trump dijo estar dispuesto a enfrentar un cierre largo a cambio de obtener sus demandas. Tiene sentido, porque en enero los demócratas tomarán el control de la Cámara Baja y podrán bloquear la financiación de la barrera en ambas cámaras.