El Presidente Sebastián Piñera se refirió este domingo al nuevo caso de fraude al fisco al interior del Ejército, profundizando la crisis que atraviesa la institución ad portas de la conformación del nuevo Alto Mando y anunció que aplicará el mismo modelo que se impuso a Carabineros para el control financiero tras el denominado caso “Pacogate”.
El anuncio lo hizo en su gira por Punta Arenas, oportunidad en que aseguró que el problema es una herencia que viene del gobierno militar, ya que “creo que en pasado las Fuerzas Armadas y de Orden en general han tenido grados de autonomía que no han permitido al poder civil, democráticamente elegido, ejercer un mayor control en materia de probidad, del buen uso de los recursos públicos y eso es algo que ya lo cambiamos en Carabineros”.
Al respecto dijo que el control administrativo será ejercido en parte por el poder civil tal como ocurre con la policía uniformada luego del millonario fraude descubierto en su interior.
“No van a ser desarrollados por miembros de las filas de carabineros, sino que por personal civil seleccionado por concurso público con los conocimientos y las habilidades. Algo parecido vamos a desarrollar también en el Ejército de Chile y en todas las ramas de las Fuerzas Armadas y de Orden, porque el gobierno no tiene en esto no solo un derecho, también tiene una obligación y a la luz de los hechos lamentables que hemos conocido se hace más urgente que nunca”, precisó
A esto también hay que sumar la feroz crítica que hace este domingo El Mercurio a la corrupción al interior del Ejército señala que “la arista abierta -por la causa judicial sobre fraude al fisco de recursos provenientes de la ley reservada- en torno a la defraudación por el mal uso de recursos públicos en la compra de pasajes para comisiones de servicio en el extranjero, arrastró a la segunda jerarquía del Ejército, el general Griffiths, exjefe del Estado Mayor General del Ejército. La figura y trayectoria profesional de ese oficial acrecentó el impacto causado por su salida y procesamiento”.
Luego, el diario menciona que “ni la institución castrense ni el Ministerio de Defensa han dado hasta ahora una explicación amplia y comprehensiva de la situación que afecta al Ejército, pero la postergación de la conformación de su alto mando hace presumir que las autoridades no han podido definir aún la magnitud y alcance de esta grave situación. Ello incluye identificar a todos los oficiales que pudieran haber incurrido en prácticas similares a las que se le reprochan al general Griffiths”.
La editorial del periódico señala que de confirmarse la indagatoria que hace la ministra en visita Romy Rutherford, sobre Pasajes y Fletes del Comando de Personal, “el problema detectado desbordaría la conducta individual de algunos altos oficiales, podría adquirir un cariz institucional aun de mayor gravedad y haría insostenible la contención informativa que llevan adelante las autoridades”.
Por su parte, el mandatario en entrevista en el mismo diario condenó las prácticas que se han conocido hasta ahora, por lo que “le he pedido al ministro de Defensa que sea muy cuidadoso y riguroso con evitar que cualquier persona relacionada con estos hechos delictuales pueda acceder al alto mando del Ejército”.
“Tengo clara mi responsabilidad como presidente de velar por instituciones armadas y de orden en un marco democrático, subordinadas al poder civil, disciplinadas, jerárquicas y obedientes, eficaces y probas en el manejo de recursos públicos. Por eso estamos impulsando con mucha fuerza el concepto de FF.AA, polivalentes, que pueden servir a Chile en tiempos de paz, de catástrofes, y por supuesto estar muy bien preparadas para defender nuestro territorio y soberanía si fuese necesario”, añadió.