La caravana de migrantes hondureños que salió el sábado de San Pedro Sula, logró atravesar -este viernes 19 de octubre- el cordón policial presente en Tecún Umán, un punto fronterizo entre México y Guatemala, logrando abrir las rejas que separan a ambos países e ingresaron a México, bajo el calor la humedad sofocante de la zona.
La caravana está conformada por unas 3.000 personas, entre las que hay hombres, mujeres y niños, y atraviesan ahora el puente sobre el río Suchiate y se dispersa por territorio mexicano con el objetivo de llegar a Estados Unidos.
El secretario de Gobernación mexicano, Alfonso Navarrete, denunció que los miles de hondureños de la caravana migrante entraron «por la fuerza» a México y que «lastimaron» a policías mexicanos que se encontraban en la frontera.
Según Navarrete, las autoridades mexicanas habían llegado a un acuerdo con los migrantes para que entraran a México de manera «ordenada» en grupos de entre 50 y 100 personas para ser revisados, pero la caravana «incumplió» el acuerdo.
Estados Unidos militarizá frontera
El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, había instado en los últimos días a detener la «embestida» y amenazó con militarizar su frontera para impedir el paso. Asimismo, el mandatario estadounidense agradeció a México por «detener» la caravana. «Por eso apreciamos mucho lo que México está haciendo», dijo en Arizona.
El mandatario aseguró sin dar mayores pruebas o argumentos que «un porcentaje bastante grande de esas personas son delincuentes». «No van a entrar a este país (…) Eso no va a pasar», añadió y advirtió que en caso de ser necesario desplegará el Ejército en la frontera.
En tanto, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, tuvo una jornada de reuniones en México DF con autoridades mexicanas para abordar el flujo migratorio de Centroamérica. Pompeo aterrizó a México con un claro mensaje en Twitter dirigido a la caravana que partió hace siete días desde Honduras: «Espero discutir con el presidente (mexicano) Enrique Peña Nieto nuestros esfuerzos conjuntos para frenar la inmigración ilegal que entra en Estados Unidos».