Sin sal ni agua, el Gobierno busca solventar la derrota parlamentaria que sufrió la semana pasada y prepara, para “los próximos días”, una nueva reforma al salario mínimo con la que busca afianzar un poco la relación con la oposición, la misma que reclamó esta jornada porque el Presidente, Sebastián Piñera, los llamó antipatriotas.

La ministra Secretaria General de Gobierno, Cecilia Pérez, hizo hincapié en esta dualidad en el bloque opositor, asegurando que existen dos tipos, una “que está presta al diálogo, a poder converger en ideas comunes para aprobar los proyectos que hoy se necesita y vemos una oposición que sigue haciendo uso reiterado de la mala figura de la retroexcavadora”, haciendo un llamado a que el uso de esta retroexcavadora daña a los chilenos.

“Como Gobierno vamos a seguir perseverando en todas las redes que digan relación con dialogar, con conversar, con llegar a acuerdos para, entro otros proyectos, sacar adelante el sueldo mínimo, porque los trabajadores de Chile lo están esperando”, enfatizó la ministra.

En tanto, la secretaria de Estado apuntó a que en los próximos días se presentará un nuevo proyecto que reemplace al rechazado la semana pasada. “Estamos dispuestos a conversar, cuando uno conversa, cuando uno dialoga, entre dos partes tiene que haber la misma necesidad de confianza para llegar a acuerdo. Eso significa ceder por ambas partes para poder conseguir el objetivo mayor que en este caso es el aumento del salario mínimo”.