Enfermedad: Meningocócica Invasora (tipo de meningitis que puede tener graves consecuencias)
Síntomas: De acuerdo con el Doctor Rodolfo Villena, pediatra infectólogo de Clínica Las Condes, la enfermedad meningocócica se da “en más del 50% de los casos, en pacientes previamente sanos, siendo de curso fulminante, con síntomas y signos inespecíficos por lo que se puede confundir con una infección viral en sus primeras horas.
Con frecuencia los primeros síntomas de esta enfermedad son:
• Fiebre
• Decaimiento
• Dolor de cabeza
• Llanto persistente especialmente en niños
• Náuseas
• Vómitos
Algunos signos más tardíos son: manchas de color rojo vinoso en la piel y rigidez en la nuca2. De todas maneras, aunque se diagnostique y trate oportunamente, de acuerdo con cifras de la OMS entre un 5 y 10% de los pacientes fallece entre las primeras 24 a 48 horas desde que aparecen los síntomas. La tasa de letalidad de la enfermedad meningocócica es del 10% al 15%, incluso con la terapia antibiótica adecuada y puede llegar al 40%.
Secuelas: Esta enfermedad debe considerarse siempre una urgencia médica, ya que cerca del 30% de quienes la padecen pueden presentar algún tipo de secuela permanente. Incluso se puede llegar a sufrir discapacidades físicas y psicológicas, alterando la vida de la persona para siempre. Hasta un 20% de los sobrevivientes tienen secuelas permanentes3: éstas pueden ser motoras, auditivas, de lenguaje, visión, y cognitivas. Si bien las secuelas físicas son evidentes inmediatamente, como las amputaciones de dedos o miembros, aquellas neurológicas pueden demorar su manifestación.
Principal medida de prevención: La vacunación
Cualquier persona puede sufrir una enfermedad meningocócica, si bien, los niños son aún más vulnerables debido a la inmadurez de su sistema inmune. Por lo tanto, el prevenir a través de la vacunación se vuelve una forma de protección vital para todos los grupos de la población. De hecho, las vacunas han sido un gran aporte en disminuir los casos a nivel mundial, siendo la principal forma de protección para la familia.
El llamado del especialista es a que todos los miembros de la familia “se acerquen a su médico para evaluar la forma de acceder a las vacunas disponibles en Chile (algunas de ellas cubiertas en el PNI), las cuales pueden ser administradas desde los 2 meses de vida en adelante. En caso de haber estado en contacto cercano con alguien con meningococo, debe contactarse con su médico para evaluar la necesidad de recibir quimioprofilaxis antibiótica y evitar que más personas se enfermen”.
Existen una serie de medidas de prevención de la enfermedad meningocócica que tienen relación con la mantención de una buena salud, higiene en el hogar principalmente con la ventilación y el lavado frecuente de manos, cubrirse la boca y nariz al estornudar o toser, y evitar el intercambio de saliva, enfriamientos y lugares hacinados. Sin embargo, es importante reforzar que la medida más eficaz es la vacunación.