Este miércoles el Ministerio de Economía de Alemania informó que en 2017 se autorizó ventas de armas -a terceros países- por 6.240 millones de euros y que en comparación a 2016 signfica una baja del 9% en el total de las operaciones.
Según el informe por segundo año consecutivo se registra una baja en las ventas autorizadas por Berlín, ya que es el Gobierno quien determina si autoriza la venta de material militar dependiendo del país solicitante y el uso.
Alemania registra el año 2015 como el de mayor en ventas de armas alcanzando los 7.500 millones de euros.
Entre las cifras del año pasado, destaca que casi el 61 por ciento de las autorizaciones fueron para ventas a los denominados terceros países -los que no pertenecen a la UE, la OTAN o equiparables, como Japón y Australia- y que 47,8 millones correspondieron a armas pequeñas -las que provocan más muertes-, una cifra algo superior a la del ejercicio previo (46,9 millones).
Seguimiento y control a países de destino
La lista de países que obtuvieron el año pasado un mayor volumen de autorizaciones empieza con Argelia y Egipto, y sigue con Lituania, EE.UU., Australia, Arabia Saudí, Corea del Sur, Emiratos Árabes Unidos, Reino Unido y Holanda. Entre los puestos undécimo y vigésimo se encuentran, por orden descendente, Austria, Suiza, India, Israel, Canadá, Indonesia, Francia, Singapur, Polonia y Brasil.
El gobierno germano explicó que en 2017 se instauró por primera un sistema de control a los envíos, para saber si las armas están realmente donde se autorizó su venta y su uso esté conforme a lo informado por los compradores. Estos controles se llevaron a cabo en India y Emiratos Árabes Unidos.
Berlín aclaró que las posiciones están muy influidas por autorizaciones concretas de grandes pedidos, como un barco a la marina argelina o un submarino para Egipto, y que estas estadísticas incluyen también el material bélico que Alemania autorizó enviar a misiones de paz de Naciones Unidas en países como Afganistán, Siria, Yemen, Burundi, Camboya, Camerún, Líbano, Mali, Pakistán, Somalia y la República Centroafricana.
Cabe recordar que el Instituto Internacional de Investigación de la Paz de Estocolmo (SIPRI), tiene ranqueada a Alemania como la quinta mayor exportadora de armamento del mundo, por detrás de Estados Unidos, Rusia, China y Francia.
El exitoso Leopard
Uno de los productos «estrella» de la industria militar alemanda es el tanque Leopard.
El Leopard 1 fue producido por primera vez en 1963 por Krauss-Maffei para el Ministerio de Defensa alemán. Se exportaron más de 6.000 vehículos a Bélgica, Dinamarca, Alemania, Grecia, Italia, Canadá, los Países Bajos, Noruega, Turquía y Australia.
El sucesor del Leopard 1, el Leopard 2, se produjo por primera vez en 1979 y está en servicio con los ejércitos de Austria, Canadá, Chile, Dinamarca, Finlandia, Alemania, Grecia, los Países Bajos, Noruega, Polonia, Portugal, Singapur y Suiza. , Suecia, España y Turquía, con más de 3.200 tanques producidos.
El ejército finlandés ha comprado 124 tanques y el ejército polaco ha comprado 128 tanques Leopard 2A4 de Alemania. En agosto de 2005, Grecia realizó un pedido de 183 tanques Leopard 2A4 y 150 Leopard 1A5 de las reservas del ejército alemán.
En noviembre de 2005, se firmó un acuerdo para la venta de 298 tanques Leopard 2A4 del ejército alemán a Turquía.
En marzo de 2006, Chile firmó un contrato para la adquisición de 140 tanques Leopard 2A4 del ejército alemán. El primero se entregó en diciembre de 2007.