Un grupo de profesores de la Universidad de Santiago, junto al diputado Tomás Hirsch (PH), llegaron este lunes a la Contraloría para que impugne una decisión del rector del plantel, Juan Manuel Zolezzi, quien está aplicando un decreto dictado en dictadura para quitarles la condición de académicos a más de 1.500 docentes.

La presidenta de la Asociación de Académicos de la USACH, Gladys Bobadilla, explicó que la presentación ante el ente contralor busca “revocar el dictamen de la propia Contraloría 7115 de marzo de este año, en que a los profesores por hora de la USACH se les considera funcionarios no académicos”.

Explicó que este grupo de docentes realiza el 70% de las clases, que “en cualquier parte del mundo la docencia es considerada como una función académica, pero este grupo de profesores se les considera no académicos debido al estatuto que rige a la universidad del año 1981, es decir en plena dictadura y que ningún rector ha querido cambiar”.

Por tal motivo, la dirigente llamó a la Contraloría para que reconozca a estos trabajadores de la universidad su estatus de académico.

En tanto, Hirsch dijo que “lo más insólito es que en enero, la Contraloría ya dictaminó que los profesores por hora son académicos de pleno derecho de la USACH, el rector Zolezzi apeló utilizando argumentación propia de un decreto de ley del tiempo de la dictadura. Es insólito que como rector que se dice democrático y que forma parte de un Estado democrático, apele a ese tipo de decreto para quitarles un derecho”.

Afirmó que estos más de 1.500 profesores, con este decreto, no tienen la posibilidad de votar y elegir a su rector, al igual que quedan desprotegidos al momento del retiro de los que tiene un profesor reconocido como académico.