En la ceremonia, el Jefe de Estado entregó la condecoración “Bicentenario Armada de Chile” a estandartes navales, visitó la Cripta de los Héroes, colocó una ofrenda floral y observó el tradicional desfile de las Fuerzas de Presentación. A la hora del hundimiento de la Esmeralda se dispararon 21 cañonazos, seguidos de repiques dobles de Campana.
Acompañado de la Primera Dama, Cecilia Morel, del Ministro de Defensa, Alberto Espina, del comandante en jefe de la Armada, almirante Julio Leiva Molina, y autoridades, destacó el heroísmo de Prat y su inspiración de cara a los desafíos actuales de Chile.
“Hoy también necesitamos ese sentido de grandeza, de unidad y de heroísmo, que inspiró a Prat esa mañana en la Rada de Iquique, y a todos los hombres que, gracias a su liderazgo, no dudaron un segundo en seguir su ejemplo heroico”, dijo el Presidente.
“Todos tenemos la oportunidad de mostrar nuestro propio sentido de grandeza y patriotismo, porque Chile hoy está empeñado también en grandes y nobles batallas, como derrotar la pobreza, como conquistar el desarrollo y construir esa patria grande, buena, justa y unida”, enfatizó.