La ministra de Transportes, Gloria Hutt, matizó este sábado sobre el nepotismo que incurrió el gobierno de Sebastián Piñera y que le costó serios cuestionamientos de parte de la oposición, afirmando que el país debe aprovechar los talentos que tienen las personas.
En una entrevista con la revista Sábado de El Mercurio, la secretaria de Estado no tiene una postura clara frente a las acusaciones de nepotismo, indicando que “creo que todos estamos de acuerdo en que no es deseable que ocurra”.
Sin embargo, a renglón seguido precisa que “también creo que el país tiene que aprovechar los talentos de las personas. En ese sentido, me parece que hay reacciones que exageran respecto al potencial beneficio que podría estar generándose hacia alguna persona que objetivamente tiene las competencias para desempeñar el cargo para el cual se le está proponiendo”.
Además, la ministra se refiere a Felipe Kast como una figura política reconocible y que podría ser uno de los candidatos para suceder a Piñera.
“Cada día que pasa, aparecen más candidatos y Felipe Kast sin duda es uno de los más reconocidos. Le tengo un gran cariño, porque he trabajado con él. Veo que el escenario está muy favorable para que podamos tener una continuidad del gobierno”, menciona.
En cuanto a la “ola feminista” que ha salido a las calles a protestar y las tomas de universidades por parte de mujeres que reclaman contra el abuso sexual, la ministra afirma que “nuestra sociedad está viviendo un fenómeno sociocultural que estaba dormido y que ya era previsible que despertara”.
“Diversas situaciones que diariamente viven las mujeres no pueden ser vistas como algo normal, en circunstancias de que se trata de abuso o acoso. Más allá de la forma de visibilizar las demandas, no hay pretexto para la impunidad frente a los actos de violencia contra la mujer”, argumenta.
Respecto a lo que es su cartera, la ministra se refiere a los cambios que traerá la licitación por el Transantiago, indicando que espera que “sea una transición ordenada, que parta por la interacción de las personas con buses de muy buen estándar, porque es verdad: dentro del bus uno lo pasa mal, no es una experiencia grata. No solo porque en hora punta se viaje más apretado, sino porque incluso del horario peak la disposición interior de los asientos es incómoda”.