Luego del ataque químico en Siria durante este fin de semana, el Consejo de Seguridad de la ONU se ha transformado en una “olla de presión”, debido a que Estados Unidos anunció que “responderá» a la agresión, mientras que Rusia lanzó una advertencia de causar «graves repercusiones» si se opta por una acción militar contra el régimen de Bashar al-Ásad.
El organismo internacional se reunió de urgencia para analizar lo sucedido en la ciudad de Duma, pero no se tenía contabilizado que se convirtiera en escenario de un nuevo cruce de acusaciones y amenazas entre las dos potencias mundiales.
De esta forma, la embajadora estadounidense, Nikki Haley, defendió el hecho que el Consejo actúe ante el supuesto uso de armas químicas, responsabilizando el ataque al régimen de Damasco. Sin embargo, dejó claramente establecido que su país está dispuesto a hacerlo por su cuenta si eso no ocurre.
«La Historia registrará éste como el momento en el que el Consejo de Seguridad cumplió con su deber o demostró su fracaso total y completo para proteger a los sirios. De cualquier manera, Estados Unidos responderá«, señaló Haley.
Además, acusó a Rusia de usar su derecho de veto para proteger a sus aliados, lamentando el «obstruccionismo» ruso y que mantener de «rehén» al máximo órgano de decisión de Naciones Unidas.
Ya el embajador ruso, Vasili Nebenzia, avisó horas antes a Estados Unidos de «graves repercusiones» si lanza un ataque contra fuerzas sirias, manifestando su preocupación por el bombardeo registrado el lunes contra otra instalación siria, del que Moscú acusa a Israel.
«Por lo que oímos, me temo que están buscando una opción militar, que es muy muy preocupante«, afirmó a los periodistas.
Nebenzia señaló que su país tenía previamente información de que rebeldes sirios estaban preparando una acción de ese tipo como provocación y recalcó que las imágenes aparecidas en los últimos días son un montaje.
Insistió en que los especialistas rusos no han encontrado ningún indicio sobre un ataque químico en Duma y dijo que expertos de la Organización Internacional para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) deberían volar a Siria mañana mismo para investigar.