Este sábado y tras los constantes bombardeos y muertes de civiles, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó un Cese al Fuego Humanitario por 30 días, aunque anoche seguían los ataques afectando principalmente a civiles.
El cese al fuego tendrá una duración de reinta días para permitir la entrada de ayuda humanitaria y el tratamiento y la evacuación de los heridos. La decisión fue adoptada por unanimidad de los quince miembros del Consejo en una resolución redactada por Suecia y Kuwait, a la que Rusia introdujo algunas enmiendas.
El documento exige el cese inmediato de las hostilidades durante treinta días consecutivos en toda Siria y el acceso semanal y seguro para entregas de ayuda humanitaria. El alto el fuego no se aplicará a las operaciones militares contra el ISIS, Al Qaeda y otros grupos terroristas.
La resolución también pide a todos los Estados Miembros que coordinen sus esfuerzos para supervisar el alto al fuego y exige que todas las partes permitan un acceso en condiciones de seguridad y sin trabas a los convoyes humanitarios de las Naciones Unidas y sus asociados.
Exige además que inmediatamente después del comienzo de la cesación de hostilidades se permitan las evacuaciones médicas de manera segura e incondicional, así como que se garantice el respeto y protección a todo el personal sanitario y humanitario, a sus medios de transporte y equipamiento, así como a hospitales y otras instalaciones de salud.
El Consejo de Seguridad también exhortó a todas las partes a levantar inmediatamente los asedios de zonas pobladas, incluidas Guta Oriental, Yarmuk, Foua y Kefraya.
El documento establece además que el Secretario General deberá entregar un informe sobre el cumplimiento de lo decidido en la resolución en los próximos quince días.
António Guterres celebró la adopción del documento y resaltó su expectativa de que sea inmediatamente implementado, particularmente en las cuestiones de ayuda humanitaria.
«El Secretario General recuerda a todas las partes de su obligación bajo el derecho internacional humanitario de proteger la población y a las infraestructuras civiles. Los esfuerzos para combatir el terrorismo no deben estar por encima de esas obligaciones», expresó Guterres en un comunicado emitido por su portavoz este sábado.