Este viernes comenzó la cita mundial sobre seguridad y uno de los temas es la ciberseguriad tema que recién se está abordando en Sudamérica y en particular en Chile (Ver Nota: Este viernes comenzó la Conferencia de Seguridad de Múnich), la estatal alemana DW publica una completa crónica escrita por la periodista Jenny Pérez, en la que se aborda la situación de la guerra por el ciberespacio que ya esta disputándose.
El mundo está en guerra y usted está en el teatro de operaciones.Es una guerra no convencional que, por ahora, se libra en un espacio irreal: el ciberespacio.
Sus consecuencias, sin embargo, son muy reales: caídas en sistemas informáticos de gobiernos e instituciones, manipulaciones en las redes sociales que influyen en procesos electorales, la difusión de noticias falsas y las teorías de la conspiración que merman la confianza y credibilidad de los actores políticos y públicos tradicionales.
En esta guerra el gran y único objetivo es el mismo de siempre: el poder. Es una guerra por cambiar el mapa geopolítico mundial, los tradicionales equilibrios de poder establecidos tras la Guerra Fría. Es una guerra que está ganando y ganará el que tenga menos escrúpulos y más concentración de poder. Una guerra que está perdiendo y perderá, por consiguiente, quien subestime esta amenaza. En esta guerra los principales actores tienen nombre: Rusia y Occidente.
Esta guerra desarrolla su propia industria y carrera armamentista. Recluta su ejército transfronterizo de bots, trolls y hackers. Europa, con Alemania a la cabeza, llega tarde a una batalla cuya amenaza se ha subestimado, según expertos del campo de seguridad internacional reunidos en el simposio Future Security Science Match, organizado por la editorial berlinesa Der Tagesspiegel, en el marco de la Conferencia Internacional de Seguridad de Múnich. No extraña que sea la prensa alemana la que convoque a este encuentro de primer nivel de expertos internacionales de política de seguridad, economía e investigación. La prensa y los medios son uno de los grandes perdedores de esta guerra cibernética.
Internet y democracia en peligro
Internet, la gran herramienta democratizadora, se ha convertido paradójicamente en la principal arma «no convencional” contra la democracia. En efecto, la esfera de la información está en mayor riesgo que nunca antes. Protegerla es la tarea urgente de los sistemas democráticos.
Según Alexander Klimburg, director del Programa de Política Cibernética y Resiliencia del Centro de Estudios Estratégicos de La Haya (HCSS), «ha llegado la hora de buscar reglas para proteger la esfera de la información, la más importante de todas”. «Está en juego nada menos que el núcleo de nuestras democracias», alerta el director del Centro de Estudios Estratégicos de La Haya en Múnich.
Lo más urgente es que las plataformas de redes sociales eliminen las informaciones falsas y el contenido peligroso de la red. Pero el desafío es aún mayor. Los expertos reunidos en Múnich, presentaron propuestas para que Europa y Alemania, convertida por la coyuntura internacional en el adalid de la democracia liberal, se posicionen en el tablero cibernético.
Cooperación y control
Sir Julian King, Comisario Europeo de Seguridad de la Unión Europea, explica que ante las nuevas amenazas se requiere una revolución silenciosa en la UE: una revolución en ciberseguridad. A su juicio, debería dividirse en cinco áreas de acción clave: más presupuesto y trabajo investigativo conjunto en caso de ataques terroristas, el avance hacia un intercambio de datos más frecuente y sistemático, el fortalecimiento hacia la unión comunitaria en seguridad a nivel local, nacional y europeo; mayor cooperación con los investigadores de las tecnologías de la información y la industria europeas y, una cooperación transnacional más integrada.
Thomas Reinhold, del Instituto para la Investigación de la Paz y la Política de Seguridad de la Universidad de Hamburgo, aboga por una más: el control de armas en el ciberespacio. «Países de todo el mundo están impulsando masivamente la guerra cibernética», sostiene
«Así como debe ser controlado el tráfico de armas convencionales, es urgente que los actores no militares desarrollen los medios para revisar y monitorear los ataques cibernéticos”, demanda el investigador de la Universidad hanseática.
Los controles y límites a esos controles son responsabilidad de los gobiernos. Pero el problema radica en que los que tienen que tomar estas decisiones no están suficientemente preparados. Según Merle Maigre, Directora del Centro de Defensa Cibernética de la OTAN, «desde enero de 2018, la OTAN coordina la formación de las unidades cibernéticas de los Estados miembros, pero muchos líderes políticos entienden muy poco de la materia”. Por ello, advierte Maigre, es tan importante comprender que «la lucha contra los ataques cibernéticos no la puede librar ningún estado por separado”. Los gobiernos deben preparar a sus ciudadanos para esta nueva dimensión en la era cibernética, con mayor inversión en la educación digital.