Las ventas de las cien principales compañías armamentísticas subieron por primera vez en 6 años en 2016 hasta 374.800 millones de dólares (318.737 millones de euros), según un informe difundido este domingo por el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI).
El alza, del 1,9% respecto al año anterior, fue provocada por la implementación de nuevos programas nacionales de armamento, operaciones militares en marcha en varios países y la creciente demanda por tensiones regionales persistentes.
El «top 100», que no incluye empresas chinas por falta de datos fiables, refleja el dominio abrumador de las firmas estadounidenses y de Europa Occidental, que controlan el 82,4% de las transacciones y acaparan la lista de las diez primeras.
Las empresas estadounidenses -38 de las cien primeras y 57,9% del comercio total- vendieron por 217.200 millones (184.711 millones de euros), un 4% más, por las operaciones militares transoceánicas y la compra de grandes sistemas de armas por otros países. De esa nacionalidad son las tres firmas armamentística más grandes, Lockheed Martin, Boeing y Raytheon.
Las empresas europeas occidentales presentaron una facturación similar a la del año anterior, con 91.600 millones (77.900 millones de euros), según el informe, que señala que el anuncio de la salida del Reino Unido de la UE no ha afectado a las compañías británicas, sino que, al contrario, subieron un 2% su facturación.
Las ventas de las firmas rusas subieron un 3,8% hasta 26.600 millones (22.621 millones de euros), un 3,8 % más interanual y un 7% del total mundial, lo que supone una ralentización de la tendencia al alza de los últimos años, que se explica por las dificultades económicas que atraviesa el país.
El informe resalta que entre los considerados productores emergentes -Brasil, India, Turquía y Corea del Sur-, este último país sobresalió con una subida del 20,6%. La brasileña Embraer subió del puesto 91 al 81, mientras que la española Navantia bajó un puesto hasta el 98.
Revise el informe completo de la organización sueca: INFORME SIPRI 2017