El Presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski, decidió la noche de Víspera de Navidad otorgarle el indulto humanitario al ex mandatario Alberto Fujimori, quien está encarcelado por violaciones contra los derechos humanos, lo cual provocó protestas y gran revuelo en toda la nación.
PPK decidió entregarle el perdón de Nochebuena, luego que el jueves pasado sobreviviera por poco a una moción del Congreso para destituirlo por acusaciones que lo vinculan con el caso de corrupción Odebrecht que ha sacudido a América Latina.
Kuczynski había sido acusado por una pate de la Fuerza Popular, el principal partido de oposición liderado por Keiko Fujimori, hija mayor de Alberto Fujimori.
Sin embargo, una facción de ese partido, influida por el hermano menor, Kenji, se separó de las directrices de Keiko la semana pasada y se abstuvo de votar, negando a los enemigos de Kuczynski la gran mayoría necesaria para removerlo del poder.
La decisión fue mirada como una jugada política del hermano menor, quien había solicitado el indulto anteriormente. La decisión adoptada anoche es vista como una forma de recompensar a Kenji Fujimori por su ayuda.
Fujimori, de 79 años, habría permanecido en prisión hasta los 93 años si hubiera cumplido su sentencia completa, pero agumentando problemas de salud como arritmia, cáncer de lengua y otras dolencias, es que había solicitado un indulto humanitario debido al deterioro de su salud.
El viernes fue trasladado de su celda a un hospital después de sufrir una caída en la presión arterial, según dijeron los médicos.
La presidencia de Perú dijo en un comunicado que un consejo médico había determinado “que Fujimori padece de una enfermedad progresiva, degenerativa e incurable y que las condiciones carcelarias significan un grave riesgo a su vida, salud e integridad”.
El informe de la junta fue presentado a la Comisión de Gracias Presidenciales que recomendó que se le otorgara el indulto a Fujimori y a otros siete internos “por razones humanitarias”.