La cámara hiperbárica ayuda a reducir el tiempo en que se recupera una lesión. Por ejemplo en un estudio realizado en esguinces de tobillo, el tiempo de recuperación disminuyó en un 30% en el grupo que se utilizó oxigenación hiperbárica comparado con un grupo control. Este tratamiento también ha demostrado éxito en la disminución de los tiempos de mejoría luego de lesiones musculares y/o fracturas.
En primavera su uso se incrementa, debido a que el clima invita a las personas a practicar más deporte al aire libre, comparados con los meses donde hay bajas temperaturas. De hecho, en esta época la actividad deportiva de la población aumenta, junto el riesgo a lesionarse.
Algunas de las funciones de este tratamiento son: aumentar la tolerancia al ejercicio, incrementar la energía muscular y disminuir la fatiga. Esto se produce debido a que, mientras se está en la cámara, el cuerpo logra respirar oxígeno al 100% en un ambiente hiperbárico. Además, tiene propiedades terapéuticas, regeneradoras y antiinflamatorias.
El tratamiento consiste en distintas sesiones de oxigenación donde el paciente se acuesta dentro de la cámara, siendo sometido a una presión atmosférica superior a lo normal y respirando oxígeno puro. Esto logra que el cuerpo acelere procesos curativos del organismo y desarrollo del cerebro. Por este motivo sirve para tratar lesiones, problemas de circulación, pie diabético, cicatrización, várices, recuperación de cirugías plásticas, entre otras dolencias.
Es recomendable que su uso sea supervisado por un profesional de la salud ya que hay algunas condiciones específicas en las cuales está contraindicado el uso de éstas, por ejemplo, problemas al oído o claustrofobia por mencionar algunas más comunes.
La cámara hiperbárica logra beneficiar a quienes practican deportes de forma regular, como una terapia complementaria para su preparación y mejorar el tiempo de recuperación de una lesión.
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