La actual campaña electoral, es una campaña visulamente más pobre, menos invasiva y desde hace muchas otras alejada de los símbolos políticos que representan sus candidatos, es decir los logos y colores de los partidos a los que representan, lo que ha dado paso a ingeniosas imágenes y formas para destacar entre la multitud de candidatos y la abulia del electorado.
Si bien es cierto, Piñerín el mono que recrea a candidato Sebastián Piñera, ha sido el más llamativo, hay otros candidatos que han creado otros mono-símbolo de sus campañas, como es el caso del Pug del candidato a senador por Valparaíso, Kenneth Pugh que asoció la raza perruna a u apellido. Similar caso es el de Carolina goic, candidata presidencial de la DC que optó por la abeja. En la campaña anterior, la abeja también fue usada por la ahora diputada Maya Fernández y la usó justamente por la asociación de su nombre con la serie de la abeja Maya.
Estos recursos visuales, distienden la campaña, le dan un toque más ludico y de alguna manera se acercan más amigablemente a un electorado que sigue mirando con desconfianza a los políticos, sean de donde sean y representen el sector que sea.