El Mercurio salió a poner la pelota en la tierra y bajar el optimismo manifestado por el piñerismo en el aspecto económico, indicando que de llegar a ganar la presidencia nuevamente el candidato de la derecha, no significa que se provoque un vuelco favorable de la economía nacional, ya que será necesario también aplicar políticas adecuadas para ese fin.
En su editorial, el “diario de Agustín” señala que hay “signos esperanzadores sobre el futuro de nuestra economía”, afirmando que el índice de actividad económica mensual, aunque anota un crecimiento interanual de solo 2,4% a agosto, muestra “una clara aceleración en los últimos meses”.
“Los índices de expectativas de empresarios y consumidores dejan atrás el mercado pesimismo de los últimos años y transmiten una visión optimista a un año plazo. La bolsa lleva 30% de alza en 2017, y las ventas de autos y camiones se recuperan aceleradamente. Con razón el ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, celebra el arribo de la primavera”, explica el diario.
Sin embargo, precisa que tal como advierte el presidente del Banco Central, Mario Marcel, suelen ser riesgosas las metáforas, ya que “aunque una que otra lluvia pueda sorprendernos, sabemos que siempre tras el invierno se viene el buen tiempo. Pero tal regularidad no existe en la economía y –como señala Marcel- no corresponde la autocomplacencia: “la economía no se maneja sola” –ha dicho-, requiere de “políticas públicas y macroeconómicas efectivas y eficientes””.
En ese sentido, la editorial menciona que los empresarios parecen haber tomado conciencia de que la calidad de las decisiones públicas no es independiente del devenir de la situación política, por lo que “no disimulan su entusiasmo por el eventual retorno del ex Presidente Piñera a La Moneda, bajo cuyo mandato se adoptaron medidas favorables al crecimiento económico y con buenos resultados. Ven, en cambio, con preocupación que hay otras candidaturas que no parecen reconocer la necesidad de enmendar las reformas implementadas durante la presente administración, que han desalentado los emprendimientos y detenido la inversión, e incluso se proponen intensificar aquellas”.
“Tal vez eso es lo que haya querido transmitir –aunque con inexcusable tosquedad- el presidente de la Bolsa de Santiago, Juan Andrés Camus, al responder una consulta periodística con el polémico pronóstico del “colapso” bursátil que provocaría una derrota electoral del ex Presidente. Pero incurriría en un costoso error quienes supusieran que en el escenario contrario –la vuelta de Piñera a la presidencia- estaría garantizado un desempeño económico tan lúcido como el que tuvo en su gestión anterior”, sostiene.
Al respecto, El Mercurio afirma que es necesario remontar la “desconfianza en nuestro compromiso como país de administrar con seriedad técnica los asuntos públicos, de priorizar la eficiencia por sobre la politiquería, de asumir cabalmente el desafío de la productividad y encuadrar el presupuesto fiscal bajo una regla creíble”.
Finalmente, la editorial explica que “es poco realista” suponer que un cambio de gobierno pueda provocar un vuelco favorable en el ámbito económico, ya que “será necesario formular un programa de gobierno adecuado, obtener de la ciudadanía un inequívoco mandato para ejecutarlo, reunir los equipos técnicos bien preparados y convocar un amplio apoyo parlamentario. El rebrote del optimismo no debe ocultar la ardua tarea que Chile tiene por delante”.
