La cifra de muertos en el sur de Asia supera los 2.100, como consecuencia de las inundaciones causadas por las peores lluvias monzónicas en más de una década en la región. Así lo informaron este viernes (01.09.2017) las agencias nacionales de gestión de desastres y organismos internacionales. Desde el pasado mes de junio, India, Nepal, Bangladesh y Pakistán sufren la peor temporada de lluvias monzónicas de los últimos años. Ello ha provocado graves inundaciones y corrimientos de tierra en la zona. Además de las 2.100 víctimas mortales, ya se han registrado unos 41 millones de damnificados, de acuerdo a las cifras proporcionadas por Naciones Unidas, según repota un cable de DW.
Según la ONU, en Nepal los fallecidos suman 159 y en Bangladesh son 144. Las autoridades de Pakistán hablan de 115 víctimas. En India la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres reportó 1.687 muertes debido a las inundaciones y sus efectos desde junio.
No obstante, en el estado indio de Bihar, el más afectado del país, la situación parece mejorar, al no registrarse nuevas víctimas después de que la cifra de muertos llegara a 514 solo en ese estado durante esta temporada de lluvias. Según las autoridades de gestión de desastres de Bihar, el agua está retrocediendo en varios de los distritos afectados por las inundaciones. Más de 4.000 personas retornaron a sus hogares. El número de campos de socorro para los damnificados pasó de 116 a 107 hace dos días.
Un plan polémico
En este contexto, el Gobierno indio espera poner en marcha en las próximas semanas un controvertido proyecto de varios miles de millones de dólares para resolver el problema de las inundaciones en algunas áreas del país y el de las sequías en otras. El proyecto prevé, en un principio, la conexión de dos ríos en los estados de Uttar Pradesh y Madhya Pradesh, pero todavía debe ser aprobado por las autoridades de este último. Diseñado en la década de 1970, el plan consiste en conectar unos 60 ríos en todo el país. Hoy forma parte de la agenda de desarrollo del primer ministro indio, Narendra Modi. Los críticos sostienen que la idea de conectar ríos es un error, ya que la capacidad de mitigar inundaciones por esa vía sería mínima.
Mientras tanto, en Pakistán, el Gobierno anunció el despliegue del Ejército en la ciudad de Karachi, en el sur del país, para mitigar la emergencia. El primer ministro paquistaní, Shahid Khaqan Abassi, ordenó al Ejército y a los efectivos paramilitares que ofrezcan asistencia y el equipamiento necesario a las agencias de rescate civiles para ayudar a bombear el agua. En Karachi ya hay 27 fallecidos, después de que 15 personas, entre ellas niños, murieran durante la noche electrocutados, ahogados o aplastados por edificios que se derrumbaron.
Miles de personas en dos barrios de la ciudad serán evacuadas ante el temor de que sean arrastradas por el río.
La cifra de víctimas mortales en la ciudad podría aumentar cuando los equipos de rescate lleguen a todas las viviendas en las áreas afectadas, dijo Anwar Kazmi, portavoz de la agencia de rescate Edhi. Las fuertes lluvias afectaron también la provincia central de Punjab, donde la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres alertó de inundaciones similares.Frente a esta situación en el sur del continente asiático, varias agencias y empresas están ofreciendo medidas de socorro a las zonas afectadas.