Marti Noxon, una de las grandes productoras y guionistas más reconocidas de Norteamerica busca dar algunas pinceladas de su experiencia lidiando con la anorexia y los trastornos alimenticios. Collins, por su parte, también ha podido apoyarse en lo vivido para meterse en el papel de su protagonista: en el pasado Festival de Sundance, la actriz habló abiertamente de sus problemas con la comida.
Durante la promoción del film, la actriz dio una entrevista para IMDb en la que habló a cerca de sus problemas con la comida. En la conversación, la intérprete cuenta que para la película tuvo que adelgazar (siempre supervisada por una nutricionista y de forma muy controlada) y fue la forma de enfrentarse y compartir los trastornos alimenticios que había sufrido en la adolescencia; un tema que había sido tabú y que, para muchos, lo seguía siendo en la actualidad.
El primer vistazo a la película ha despertado una variedad de reacciones en línea. Algunas personas sienten que la película es necesaria, porque muestra que la vida después de un trastorno alimentario es buena y posible. Sin embargo, otros creen que la película podría ser desencadenante, y que solo muestra una parte ligera y “romántica” de trastornos alimenticios.
Fuente: Harper Bazaar