En el marco de su visita a China, la Mandataria Michelle Bachelet, visitó este sábado el Banco Asiático de Inversiones e Infraestructura (AIIB) y se reunió con el presidente de la entidad, Jin Liqun, con motivo del ingreso de Chile a dicha organización multilateral financiera, que tiene como propósito invertir en proyectos de infraestructura y telecomunicaciones para mejorar la conectividad entre Asia y América Latina.
Tras el encuentro, sostuvo que “hemos llegado a la fase final del proceso para convertirnos en un miembro prospectivo no regional. Estamos muy contentos de haber sido aceptados como miembros, y por supuesto que tenemos que hacer nuestra parte como Gobierno de Chile para ratificar la membresía completa”, sostuvo la Presidenta Bachelet.
Y agregó que “creemos que la AIIB es una institución financiera multilateral, que reúne a los países para atender las necesidades de infraestructura. Y la promoción de más interconectividad y desarrollo económico, a través de mejores infraestructuras y sectores productivos, puede fomentar el crecimiento y mejorar el acceso a los servicios básicos”.
En la misma línea, la Jefa de Estado informó: “Chile considera a esta institución como un complemento positivo de la estructura existente del sistema financiero internacional. Estamos optimistas acerca de las oportunidades de trabajo conjunto sobre proyectos de infraestructura, conectividad y energía, entre otros”.
El Banco Asiático de Inversiones e Infraestructura (AIIB) fue fundado con el objetivo de juntar países para cubrir las enormes necesidades de infraestructura a través de Asia. Busca fomentar la interconectividad y el desarrollo económico en la región a través de avances en infraestructura y otros sectores productivos, estimulando el crecimiento y mejorando el acceso a los servicios básicos. Con un capital de 91.972 millones de dólares, inició funciones el 16 de enero de 2016, después de un proceso participativo de 15 meses. Actualmente, tiene 52 miembros, de los cuales destacan, entre fundadores no asiáticos, Reino Unido, Alemania, Francia, Australia, Nueva Zelanda y Brasil. Posteriormente, se han incorporado Perú y Venezuela, en calidad de miembros prospectivos, y hay varios otros países de la región que han presentado cartas de intención para incorporarse al mismo.
La Mandataria aseguró que “hemos hablado con el presidente y el vicepresidente del Banco sobre la posibilidad, por ejemplo, de invertir en un Cable de Fibra Óptica Transpacífica, un proyecto que podría mejorar la conectividad digital entre Asia y China con América Latina. El cable podría considerarse parte de la Iniciativa «Una franja, una ruta» y transformar el Océano Pacífico en un puente entre nuestras regiones”.
Finalmente, dijo que “también hemos destacado otras áreas de inversión, incluyendo los corredores bioceánicos que conectarán los Océanos Atlántico y Pacífico, y los túneles y carreteras que atraviesan la Cordillera de los Andes o los puertos que podrían comunicar a América del Sur con Asia, cuyo objetivo es mejorar el acceso a los puertos, el tiempo de transporte, mejorar la conectividad regional y promover el comercio entre América Latina y Asia”.