La ex directora de Junji, Ximena Ossandón, salió a darle duro a la proclamación del ex Presidente Sebastián Piñera, afirmando que todo se trata de un “show televisivo” y arremetió afirmando que hubo acarreo de personas y “designaciones a dedo” para que asista gente al lanzamiento de la candidatura del ex gobernante que se efectuará esta noche en Quinta Normal.
«La parafernalia que montaron tras un lanzamiento de campaña, que justamente debería ser algo espontáneo donde todos los chilenos tengan derecho a participar. Una mentira«, sostuvo fuerte la también candidata a diputada por el distrito 12 a T13.cl.
La hermana del precandidato presidencial y actual senador, Manuel José Ossandón, denunció estar segura que «acá lo más probable que hubo acarreo, designaciones a dedo y mensajes sólo para las cámaras, todo lo que Chile quiere desterrar de sus prácticas. Nos aburrimos de mensajes armados, de mentiras, de acomodos y discursos falsos«.
“Hay bastante inconsecuencia en el mensaje que quiere entregar nuestro sector. Derroche de recursos, palabras disonantes y una enorme poca empatía a lo que vive y sufre hoy el país. Me da mucha pena que las ideas sean pisoteadas por la plata y la superficialidad. Acá hay un show televisivo montado, cinco cámaras, un director de cine, una puesta en escena que no es del Chile que se vive hoy”, aseguró la ex directora de Junji.
En ese sentido, lanzó una fuerte crítica a su sector, indicando que “la derecha chilena anda en otra, cree que todo es espectáculo, cuando en realidad lo que necesitamos es sincerarnos a nosotros mismos y preguntarnos qué es lo que queremos como derecha, cuáles son los principios que nos rigen como sector”.
“Chile debe preocuparse de seguir reduciendo la pobreza y mejorar las condiciones de vida de los sectores populares y medio bajos, pero también preocuparse de la concentración de la riqueza para impedir una explosión social y además separar de una vez los negocios y la política, porque obviamente los más ricos y los grupos económicos más monopólicos quieren leyes que no los perjudiquen y terminan influyendo en un tema que una buena democracia no debería permitir”, concluyó.
